ETA aumenta las cargas de sus bombas al haber caducado la dinamita que rob¨® en 1999
Un comando formado por etarras y separatistas bretones asalt¨® el 28 de septiembre de 1999 un almac¨¦n de la empresa Titanite, SA, en Pl¨¨vin (Breta?a), del que rob¨® m¨¢s de 8.000 kilos de Titadyne 50, un potente explosivo industrial utilizado para voladuras en minas y canteras. La mayor parte de la dinamita fue recuperada en operaciones policiales posteriores en Francia, pero la banda terrorista logr¨® conservar una partida de este explosivo cuya cuant¨ªa se desconoce.
No obstante, las fuentes de la lucha antiterrorista consultadas calculan que ETA logr¨® retener dos toneladas de Titadyne, un explosivo homologado en Francia por Ineris (Instituto Nacional del Medio Ambiente Industrial) en marzo de 1999. Este tipo de dinamita industrial es conocida entre los ingenieros de minas por su capacidad para fragmentar rocas de gran dureza para facilitar y abaratar su posterior machacado.
La dinamita robada caduc¨® en diciembre, lo que implica que para conseguir el mismo efecto hay que emplear mayor cantidad. Este hecho explicar¨ªa el que ETA cargase con casi cuatro kilos la bomba lapa con la que el pasado d¨ªa 26 la banda mat¨® al cocinero Ram¨®n D¨ªaz en San Sebasti¨¢n.
Dicha cantidad fue considerada por expertos antiterroristas como 'excesiva y desproporcionada' en comparaci¨®n con la carga de bombas similares confeccionadas anteriormente por ETA. Todav¨ªa mas extra?¨® a los artificieros del Cuerpo Nacional de Polic¨ªa de Sevilla el que ETA hubiera cargado con 160 kilos de dinamita el coche bomba que coloc¨® el 31 de diciembre de 2000 frente a la Tesorer¨ªa de la Seguridad Social, que no explot¨® por un fallo en el dispositivo de ignici¨®n.
El segundo gran problema que presenta la dinamita caducada es que puede empezar a sudar (segregar nitroglicerina l¨ªquida), especialmente si no est¨¢ almacenada en las condiciones adecuadas, por lo que cada d¨ªa que pasa y cada grado de temperatura que sube el riesgo de deflagraci¨®n espont¨¢nea aumenta, seg¨²n expertos en explosivos consultados.
ETA ha puesto en juego durante 2000 y lo que va de este a?o grandes cantidades de dinamita en sus coches bombas y bombas lapa, cuya explosi¨®n provoc¨® la muerte de 10 personas. Sin embargo, a partir del mes de octubre comenz¨® una cadena de fallos, muchos de ellos puros golpes de fortuna para las v¨ªctimas elegidas pero otros muchos debidos a errores de montaje.
Los expertos antiterroristas aseguran que la cadena de fallos comenz¨® con la desarticulaci¨®n del aparato log¨ªstico de ETA entre el 16 y el 17 de septiembre de 2000, cuando cay¨® uno de los considerados m¨¢ximos dirigentes etarras, Ignacio Gracia Arregi, I?aki de Renter¨ªa. Esta operaci¨®n rompi¨® el subaparato de electr¨®nica, responsable de la 'fabricaci¨®n y distribuci¨®n de los componentes y dispositivos necesarios para los artefactos explosivos, sobre todo los utilizados en los coches bomba', capitaneado hasta entonces por Pedro Ignacio Santesteban Goikoetxea, Einstein.
Los expertos antiterroristas manejan tambi¨¦n la tesis de que ETA decidi¨® cambiar sus m¨¦todos a ra¨ªz de la muerte de cuatro de sus miembros en Bilbao, el pasado 7 de agosto, al estallarles la bomba que transportaban en un coche. Creen que la banda hizo una 'autocr¨ªtica' que le llev¨® a dise?ar un nuevo sistema de montaje m¨¢s seguro para los terroristas, pero que habr¨ªa resultado menos efectivo.
Los desactivadores de explosivos guardan celosamente sus conclusiones sobre el porqu¨¦ de los reiterados fallos en las bombas 'para no dar pistas al enemigo'. Adem¨¢s, est¨¢n convencidos de que ETA har¨¢ una nueva autocr¨ªtica para buscar el fallo y corregirlo.
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