Correa se hizo italiano pocos meses despu¨¦s de deneg¨¢rsele la nacionalidad espa?ola

Correa fue fichado por el Atl¨¦tico de Madrid en agosto de 1995, y cedido al Racing de Santander un a?o despu¨¦s. En enero de 1998, cuando llevaba m¨¢s de dos a?os en Espa?a y ya pod¨ªa por tanto solicitar la nacionalidad espa?ola, el club c¨¢ntabro inici¨® los tr¨¢mites para obtenerla en el registro Civil de Santander. Dos meses despu¨¦s, el ministerio de Justicia le deneg¨® la petici¨®n por no cumplir el requisito fundamental: dos a?os de residencia legal y continuada en nuestro pa¨ªs. Aunque el juez de Santander recurri¨® la decisi¨®n, haciendo notar que era p¨²blico y notorio que el futbolista llevaba residiendo en Espa?a ese plazo, desde Madrid le respondieron que, por descuido, Correa no renov¨® su tarjeta temporal de residencia (v¨¢lida para un a?o) cuando caducaba, sino meses despu¨¦s, dejando, as¨ª, un lapso de tiempo entre a?o y a?o.

La negativa fue un duro golpe para Correa, quien ya no podr¨ªa jugar como comunitario y seguir¨ªa ocupando plaza de extranjero. Y una vez terminada la temporada, lo repesc¨® el Atl¨¦tico de Madrid, club que lo inscribi¨® como uruguayo en la Liga en julio de 1998.

Sin embargo, no todo estaba perdido para el uruguayo, cuyo agente es Francisco Casal, el mismo representante de ?lvaro Recoba, el jugador uruguayo del Inter de Mil¨¢n, cuyo pasaporte est¨¢ siendo investigado por los jueces italianos. Correa contaba con la memoria de sus abuelos. 'Entonces, cuando me lo denegaron, cuando me dijeron que no me daban la nacionalidad espa?ola', comenta el futbolista, 'habl¨¦ con mis abuelos, quienes me recordaron que mis bisabuelos eran italianos, que hab¨ªa llegado a Uruguay desde Trappani, cerca de N¨¢poles'.

El futbolista entonces decidi¨® solicitar la nacionalidad italiana bas¨¢ndose en esos antecedentes y en la norma italiana, que permite obtener su pasaporte a 'todos los descendientes de italianos que no hayan renunciado expresamente a su nacionalidad'. Ten¨ªa ante s¨ª Correa una tarea heroica, un papeleo que, seg¨²n su colega Fernando Ayala, ¨ªtalo-argentino del Valencia, exige casi dos a?os de tramitaci¨®n. Pero eso no fue ¨®bice para que Correa lo completara en un par de meses. 'Ese verano me fui a Uruguay y con los documentos que consegu¨ª me present¨¦ en la embajada italiana en Madrid', explica el futbolista. Y el 28 de octubre de 1998, la ministro canciller, jefe de ciudadan¨ªa del consulado italiano en Madrid, Patrizia Zampieri, estamp¨® su firma en un flamante pasaporte a nombre de Fernando Correa, nacido en Montevideo.

Con una fotocopia de este pasaporte, el Atl¨¦tico de Madrid cambi¨® en la Liga el estatus del jugador, quien ya era comunitario y dejaba de sumar como extranjero. Su plaza la ocup¨® un par de meses despu¨¦s el argentino Santiago Solari, fichado en el mercado de invierno.

Fuentes cercanas al club rojiblanco no se han recatado en mostrar su preocupaci¨®n por las presuntas irregularidades en la obtenci¨®n de la nacionalidad italiana por parte del jugador. Incluso temen que alg¨²n club rival se decida a solicitar una investigaci¨®n judicial de sus papeles. 'Temen haber sido enga?ados', comenta una fuente cercana al club, cuyos dirigentes abrir¨¢n una investigaci¨®n interna.