Saramago apela al periodismo de reflexi¨®n para instalar la duda en la sociedad

El consejero delegado del Grupo PRISA, Juan Luis Cebri¨¢n, resalt¨® la doble faceta -como escritor y como periodista- de Jos¨¦ Saramago. Como escritor, destac¨® su talento 'formidable y apote¨®sico' pese a hacer una literatura 'muy reflexiva y profunda'. Y como periodista, record¨® su etapa en el portugu¨¦s Diario de Noticias. Eran los a?os posteriores a la revoluci¨®n de los claveles de 1974, y Cebri¨¢n asegur¨® que este puesto le permiti¨® al autor de El evangelio seg¨²n Jesucristo o Ensayo sobre la ceguera conocer 'los entresijos del periodismo y las relaciones con el poder en un momento azaroso'.

Jos¨¦ Saramago arranc¨® la lecci¨®n inaugural del Master de Periodismo UAM-EL PA?S pregunt¨¢ndose si es necesario reinventar el periodismo, y salpic¨® su intervenci¨®n con an¨¦cdotas rescatadas de sus tiempos de editorialista. 'Escrib¨ªa sin que nadie me dijera nada. Yo era una persona enfrentada con su propia conciencia'. Destac¨® Saramago 'el privilegio, la suerte y la responsabilidad' de escribir todos los d¨ªas sin que el director conociera sus opiniones hasta verlas publicadas al d¨ªa siguiente. De aquella ¨¦poca (entre 1972 y 1974) record¨® las esperanzas que ¨¦l y sus colegas ten¨ªan puestas en el fin del fascismo para poder abordar 'un periodismo libre y cr¨ªtico'. Pero, con cierto tono pesimista, asegur¨® que el panorama es, en realidad, todo lo contrario a lo que imaginaron.

En realidad, Saramago no cree que haya que reinventar el periodismo, pero es partidario de reinventar al periodista. 'El problema del periodista es que vive en un mundo de apariencia', dijo. Por eso, inst¨® a los profesionales a acercarse a los hechos y a dar 'la vuelta completa' a los mismos para poder ver su aut¨¦ntica dimensi¨®n.

Saramago compar¨® el periodismo en libertad con el ciudadano en libertad. Y vincul¨® a ¨¦ste con la democracia. 'La equivocaci¨®n con consecuencias m¨¢s nefastas est¨¢ en el hecho de pensar que la democracia es un punto de llegada. Tanto para la democracia como para la vida social, la democracia no es un punto de llegada, sino un punto de partida'. Asegur¨® que toda la capacidad de protesta, incluso la que se ejerc¨ªa en la clandestinidad, se agot¨® cuando lleg¨® la democracia.

En esta l¨ªnea de reflexi¨®n, el Nobel de Literatura asegur¨® que el poder real no es el poder pol¨ªtico. 'Elegimos un parlamento, pero, que yo sepa, ninguna multinacional se present¨® a las elecciones en Espa?a o Portugal', dijo. Tras advertir que 'quien gobierna es Bill Gates', reclam¨® una reflexi¨®n sobre la nueva forma de totalitarismo que se esconde bajo el manto de la globalidad econ¨®mica.

Durante su intervenci¨®n, Saramago alert¨® sobre la responsabilidad de los medios, 'infinitamente m¨¢s grande de la que los propios medios creen tener'. El escritor portugu¨¦s se mostr¨® convencido de que ning¨²n periodista duda de los problemas que amenazan a la humanidad, pero rega?¨® a los peri¨®dicos por no profundizar en las cuestiones que realmente interesan a la gente y por dedicar demasiado espacio a 'la superficie, a la peque?a espuma que fluct¨²a en la superficie'. Tambi¨¦n reproch¨® a los periodistas su actuaci¨®n como 'prestatarios de contenidos'.

En la inauguraci¨®n de la XV edici¨®n de la Escuela de Periodismo UAM-EL PA?S, Saramago comparti¨® la tribuna con el rector de la Universidad Aut¨®noma de Madrid, Ra¨²l Villar; el presidente del Grupo PRISA, Jes¨²s de Polanco; el consejero delegado de PRISA, Juan Luis Cebri¨¢n; el director de la Fundaci¨®n Escuela de Periodismo UAM-EL PA?S, Cayetano L¨®pez; el vicepresidente de esta entidad y consejero de PRISA, Jes¨²s de la Serna, y el director de la Escuela, Joaqu¨ªn Estefan¨ªa.

Villar agradeci¨® a Saramago haber sembrado la inquietud entre los alumnos y anim¨® al Nobel a reflexionar sobre si es necesario reinventar la Universidad.