Desmontar no autoriza a ampliar
El momento jur¨ªdico en el que se encuentra hoy el proceso judicial relativo al claustro de San Jer¨®nimo el Real arranc¨® en octubre de 1998, fecha en la que el Consejo de Ministros, presidido por Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, autoriz¨® la modificaci¨®n del Plan General de Ordenaci¨®n Urbana, que reg¨ªa para el ¨¢rea de los Jer¨®nimos. El acuerdo persegu¨ªa hacer posible la ampliaci¨®n del Museo del Prado sobre el claustro, explica Fernando Ledesma, presidente de la Sala Tercera del Tribunal Supremo. 'Ante aquel acuerdo, fueron presentados algunos recursos [para anularlo]'.
Al finalizar el verano, el Ministerio de Educaci¨®n y Cultura andami¨® el claustro, que consideraba muy deteriorado. Los vecinos temieron que aquello encubriese la ampliaci¨®n del Prado. Entonces, adem¨¢s de los recursos presentados, los demandantes solicitaron medidas cautelares encaminadas a detener las actuaciones. 'Esas medidas pueden ser adoptadas sin necesidad de o¨ªr a la parte opuesta', subraya el magistrado presidente Ledesma.
La Sala Tercera decidi¨® realizar, en octubre de 2000, una inspecci¨®n ocular sobre el claustro. Tras subir a los andamios y recibir explicaciones de t¨¦cnicos del Instituto del Patrimonio Hist¨®rico all¨ª destacados, 'comprob¨® lo que ya hab¨ªa le¨ªdo y autoriz¨® el desmontaje, por estimar que exist¨ªan razones de seguridad personal y monumental para ordenarlo'. Ledesma a?ade: 'Si el proyecto de Rafael Moneo no ha sido a¨²n aprobado, no cabe interpretar las medidas como autorizaci¨®n ni desautorizaci¨®n de aqu¨¦l'. En la fase actual, 'los recurrentes han de formalizar con detalle su demanda'.
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