Napster, abocado a convertirse en un servidor de pago de Bertelsmann
Naspter, el servidor de Internet que ha plantado cara a la industria musical difundiendo canciones gratis por la red, ha perdido una batalla pero espera ganar la guerra. Es casi seguro que la p¨¢gina web norteamericana se vea abocada a desaparecer despu¨¦s de que un tribunal de San Francisco la acusara el pasado lunes de violar las leyes sobre derechos de autor. Pero aunque Napster cierre, otros servidores est¨¢n listos a tomar el relevo, con el apoyo de millones de cibernautas.
El servidor no se da por vencido. Ya ha dicho que recurrir¨¢ la sentencia hasta el Congreso si hace falta. Pero sus d¨ªas de m¨²sica gratis han terminado. Su futuro m¨¢s probable es convertirse en una p¨¢gina de pago dentro del conglomerado del gigante de la comunicaci¨®n alem¨¢n, Bertelsmann. ?ste era originalmente uno de los demandantes, pero se retir¨® del caso tras alcanzar un acuerdo con Napster el pasado octubre.
La decisi¨®n del tribunal de apelaciones de San Francisco ha sentado las bases legales para acabar con Napster, confirmando las acusaciones de pirater¨ªa lanzadas hace m¨¢s de un a?o por las grandes discogr¨¢ficas norteamericanas. Pero el veredicto, a su manera, tambi¨¦n ha respaldado la tremenda innovaci¨®n tecnol¨®gica de este servidor, el mayor fen¨®meno cibern¨¦tico desde su creaci¨®n, hace apenas dos a?os.
Napster es una web que permite descargar gratuitamente archivos musicales conectando dos ordenadores a trav¨¦s de Internet, algo as¨ª como intercambiar discos entre vecinos. El servidor siempre se ha amparado en esta sencilla interpretaci¨®n para defender su causa: sus usuarios no ten¨ªan ¨¢nimo de lucro. Las discogr¨¢ficas no lo entendieron as¨ª cuando Napster empez¨® a sumar adeptos que se cifran ahora en los 60 millones.
Violar derechos de autor
La sentencia del lunes confirma que el servidor 'conoc¨ªa y promov¨ªa' la violaci¨®n de los derechos de autor al permitir que los ciber-nautas descargaran canciones a trav¨¦s de su p¨¢gina, sin abonar un centavo. El tribunal de San Francisco remiti¨® la decisi¨®n final a la juez que el verano pasado, ante la demanda de las discogr¨¢ficas, mand¨® cerrar Napster.
La reacci¨®n de los fans no se hizo esperar. Las dos preguntas que m¨¢s se le¨ªan en los chats eran ?Hasta cu¨¢ndo podremos descargar m¨²sica gratis en Napster? ?Qu¨¦ otras p¨¢ginas web hacen lo mismo? Hay muchas, Gnutella y Frente son las m¨¢s conocidas. El problema al que tendr¨¢n que enfrentarse ahora las discogr¨¢ficas es que la tecnolog¨ªa existe, funciona y los cibernautas se han aficionado a escuchar sin pagar.
Napster es el invento de un estudiante de entonces 19 a?os, Shawn Fanning, que en mayo de 1999 encontr¨® un programa sencillo para intercambiar m¨²sica con sus colegas. Se lo pas¨® a unos amigos por Internet y surgi¨® el fen¨®meno. El pasado lunes, a poco de conocerse la sentencia, Fanning, pidi¨® apoyo de sus fans. 'Los usuarios deben manifestar lo que sienten acerca del sistema, cuanto m¨¢s lo hagan m¨¢s poderosos seremos'.
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