'Decidiremos cu¨¢nto y con qu¨¦ calidad queremos crecer'
'La moratoria tur¨ªstica paraliza la posibilidad de consolidar el derecho a construir la barbaridad de 800.000 camas'
Rom¨¢n Rodr¨ªguez, m¨¦dico, de 44 a?os, gobierna desde hace unas semanas la Comunidad Aut¨®noma Canaria con un Ejecutivo monocolor de Coalici¨®n Canaria tras la salida de sus socios del PP despu¨¦s de la ¨²ltima crisis. El Gobierno de Rodr¨ªguez ha aprobado por sorpresa, el pasado 12 de enero, un decreto de moratoria tur¨ªstica que paraliza la actividad constructora en las islas para las nuevas licencias, al menos durante un a?o, tras alcanzar la cota de 380.000 plazas tur¨ªsticas. Rodr¨ªguez cree que con esta dr¨¢stica medida no s¨®lo no perjudica el turismo como gran motor del archipi¨¦lago, con el r¨¦cord en el a?o 2000 de 12 millones de visitantes, sino que se concede tiempo para ordenarlo y reorientarlo a condiciones de mayor calidad.
'Estamos en el buen camino: los conservacionistas consideran la ley insuficiente y los constructores est¨¢n descontentos'
Pregunta. ?El Gobierno canario ha aprobado ahora el decreto sobre la moratoria tur¨ªstica porque se ha llegado al l¨ªmite en la actitud devoradora de la construcci¨®n en las islas?
Respuesta. Canarias est¨¢ viviendo el mejor momento de su historia en todos los ¨®rdenes. Pero tenemos preocupaci¨®n y debilidad. La estructura econ¨®mica del archipi¨¦lago siempre fue de monocultivo. Primero, la uva; luego, la ca?a de azucar, el tomate, el platano, y las ¨²ltimas d¨¦cadas, el turismo. Y en ese sentido, desde el principio de esta legislatura yo insist¨ª en la necesidad de reflexionar sobre el modelo de crecimiento y en hacer sostenible la estructura econ¨®mica y en utilizar inteligentemente nuestro territorio. Lo que hemos hecho ahora el Gobierno de una manera un tanto sorpresiva, sin consultar ayuntamientos y cabildos ni sectores sociales, es suspender todo el planeamiento en todos los ¨¢mbitos, las licencias y comprometerse a establecer, entre uno y dos a?os m¨¢ximo, el instrumento de las directrices de ordenaci¨®n tur¨ªstica o incluso a trav¨¦s de una ley especial de medidas urgentes en materia de sostenibilidad, con especial hincapi¨¦ en el sector tur¨ªstico.
P. ?Qu¨¦ es lo que paraliza este decreto?
R. Paraliza la posibilidad de consolidar el derecho hasta 800.000 camas m¨¢s, que son las potencialmente posibles en el planeamiento vigente. Algo que es una barbaridad. As¨ª y todo, hay 90.000 camas con licencia autorizada
P. ?Qu¨¦ condiciones se le marcar¨¢n a los constructores para compatibilizar el denominado modelo del desarrollo sostenible canario?
R. Cada territorio es diferente. Hay islas, como Fuerteventura, que su crecimiento va a ser m¨ªnimo. En Lanzarote, Gran Canaria y Tenerife tiene que ser muy moderado. Y ser¨¢ m¨¢s sensible en donde hoy no hay muchas instalaciones tur¨ªsticas, como La Palma, La Gomera y Hierro, donde ser¨¢ diferente. El planteamiento es crecer pensando en la gente que est¨¢ aqu¨ª viviendo y no como ahora, que para sostener el actual crecimiento estamos importando mano de obra de forma masiva. Lanzarote y Fuerteventura han duplicado su poblaci¨®n en los ¨²ltimos 10 a?os. Y con ciudadanos que vienen aqu¨ª con su maleta, sino que los vamos a buscar, municipio por municipio. Tenemos un problema demogr¨¢fico preocupante en Lanzarote y Fuerteventura; en relaci¨®n al consumo energ¨¦tico, de agua, que es un bien escaso y caro en este territorio; tenemos problemas en la producci¨®n de residuos, en el dimensionamiento de los servicios sociales, sanitarios y educativos. Esta parada lo que nos va a permitir en los pr¨®ximos a?os es decir cu¨¢nto crecemos en cada territorio y con qu¨¦ calidad en el sector tur¨ªstico.
P. No es la primera vez que el sector tur¨ªstico canario se enfrenta a una crisis y que ese desarrollo amenaza al entorno.
R. No es sencillo compatibilizar ambas cosas, y menos desde la Administraci¨®n. Aqu¨ª lo razonable ser¨ªa que el mercado fuera capaz de autorregularse. Pero la realidad es que ahora los empresarios tur¨ªsticos son los que nos est¨¢n pidiendo una intervenci¨®n por el desequilibrio de la oferta, porque estamos creciendo un 12% anual y esto no hay mercado que lo soporte. Nosotros tenemos ahora 12 millones de visitantes y un turismo de calidad intermedia y queremos consolidar y fidelizar a esos visitantes y mejorar las calidades. En este decreto nosotros permitimos algunas excepciones: el turismo rural; los hoteles de ciudad, que no hay en algunas islas; la renovaci¨®n de las 50.000 camas antiguas, fuera de mercado, y las instalaciones de cuatro y cinco estrellas si est¨¢n asociadas a parques tem¨¢ticos. Tenemos pocos campos de golf, tampoco queremos muchos, pero s¨ª m¨¢s; tenemos s¨®lo 2.000 atraques en todo el archipi¨¦lago. Las islas est¨¢n castigadas, m¨¢s de lo que quisi¨¦ramos, pero nuestro nivel de protecci¨®n es alto.
P. ?Hasta d¨®nde se quiere llegar en el fomento de las energ¨ªas limpias?
R. Al m¨¢ximo, especialmente en la e¨®lica. Somos la segunda comunidad, despu¨¦s de Navarra. Pero el problema ya no es tanto de utilizaci¨®n de energ¨ªas renovables, sino de que no podemos dar abasto, especialmente en algunas zonas, como el sur de Tenerife, para abastecer el consumo de energ¨ªa, de agua.
P. ?Cu¨¢les son las infraestructuras b¨¢sicas necesarias para no tener que seguir dependiendo siempre del turismo como ¨²nico man¨¢?
P. ?Pol¨ªticamente, c¨®mo se ha acogido esta medida?
R. Ha habido una oposici¨®n, muy tibia, porque la mayor¨ªa social de los ciudadanos se percatan de su necesidad. Los sectores m¨¢s conservacionistas est¨¢n contentos, pero la consideran insuficiente. Y los constructores est¨¢n muy descontentos y lo consideran una agresi¨®n. Lo que me hace pensar que estamos en el buen camino.
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