Descafeinado
En nuestro pa¨ªs -y en la mayor¨ªa de los otros tambi¨¦n- hace falta morirse para que le hagan caso a uno. Joan Brossa, anarquista empedernido y gran poeta visual con obras est¨¦ticamente muy radicales realizadas en plena posguerra, muri¨® justo cuando ten¨ªa que morir, es decir, cuando ya se le acercaban no los que admiraban al hombre y al artista sino los que siempre van en pos de los verdaderos genios por ver si algo les toca con su roce. Hoy se abre una retrospectiva que siempre es merecida, pero que habr¨ªamos deseado planteada de otra manera. Me explicar¨¦. Esta exposici¨®n ha sido organizada por la Generalitat, una instituci¨®n que hizo muy poco por el poeta, pero que pas¨® a considerarlo como un catal¨¢n universal en 1997, a ra¨ªz de su selecci¨®n para el pabell¨®n espa?ol de la Bienal de Venecia. Un poco antes, en las retrospectivas organizadas en M¨¦xico (Museo Carrillo Gil y Museo de Monterrey, ambos de gran prestigio) la Generalitat puso entonces 300.000 pesetas: muy poco para tan gran hombre, calderilla para sellos. Ahora todos correr¨¢n a fotografiarse con su viuda.
Sin duda la exposici¨®n ser¨¢ correcta, pero un evento as¨ª habr¨ªa de servir para a?adir conocimiento, para estudiar aspectos poco conocidos de su obra. Pues bien, me parece triste e injusto que nadie haya sido designado para hablar del Brossa radical, del poeta blasfemo, del ¨¢crata contrario a todas las may¨²sculas -Patria (que no Catalu?a), Religi¨®n, Familia-. Es decir, me temo que nos traer¨¢n un Brossa descafeinado del que pronto ya no se sabr¨¢ si se trata de un joven que hace instalaciones o de un visionario perfectamente l¨²cido que pas¨® toda su vida sin hacer ninguna concesi¨®n. Una preocupaci¨®n suplementaria se a?ade a todo ello; ¨¦sta es la de la fundaci¨®n creada tras su muerte. Si quieren la escueta verdad, a un artista se le puede encumbrar o, por el contrario, hundir muy f¨¢cilmente en los primeros 10 a?os que siguen a su muerte. Depende sencillamente de con qu¨¦ criterios se aborda la difusi¨®n, publicaci¨®n y comercializaci¨®n de su obra, para lo cual se requiere una amplia experiencia en estos tres espinosos terrenos. Que Brossa se convierta en una gloria local que ilustre los carteles de la primera Asociaci¨®n de Boy Scouts que aparezca o que vea en cambio su nombre codeado con el de Duchamp o el de Mir¨®, es hoy nuestra responsabilidad. Existen varios casos de artistas fallecidos recientemente cuyas fundaciones son un ejemplo de correcci¨®n: Esteban Vicente y Jos¨¦ Guerrero. En estos momentos, lamentablemente, Catalu?a no est¨¢ siendo, en arte, ejemplo de longitud de miras y profesionalidad. Esperemos que me equivoque.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.