La boda del hermano de la ministra

Jos¨¦ Villalobos, hermano de la ministra de Sanidad, Celia Villalobos, se cas¨® en segundas nupcias el 3 de agosto de 1998, cuando ¨¦sta a¨²n era alcaldesa de M¨¢laga, en el Jard¨ªn Bot¨¢nico Hist¨®rico La Concepci¨®n, finca de propiedad municipal, en la que se celebr¨® la ceremonia civil y el banquete, con m¨²sica y baile.

El Ayuntamiento sin embargo no tiene acreditado que se abonaran todas las tarifas por el evento. S¨ª est¨¢ certificado el pago de 100.000 pesetas por la ceremonia civil, pero no el canon por el uso del recinto para las celebraciones o banquetes, que aquel a?o era de 1.300 pesetas por cada asistente.

En las liquidaciones de los presupuestos municipales de los a?os 1998, 1999 y 2000 no aparece ninguna entrada de dinero correspondiente al uso de La Concepci¨®n para la celebraci¨®n de la citada boda. Ni siquiera en los estadillos del Patronato Bot¨¢nico, donde se recogen todos los eventos y actos que se celebran en los jardines que tutela, figura que hubiera ninguna celebraci¨®n en el recinto el 3 de julio de 1998.

S¨ª hay constancia en cambio de que dos trabajadores de la finca realizaron horas extra hasta las seis de la ma?ana. Aunque la celebraci¨®n de la boda no existi¨® en ning¨²n documento oficial, el propio Villalobos ha reconocido que se cas¨® en La Concepci¨®n y que tambi¨¦n celebr¨® el banquete all¨ª.

Las ordenanzas municipales establecen varias tarifas distintas por el uso de los jardines hist¨®ricos de La Concepci¨®n y La C¨®nsula. Una boda civil en 1998 costaba 86.207 pesetas m¨¢s IVA. Aunque habitualmente el ingreso de esta tasa se suele hacer por adelantado, Jos¨¦ Villalobos abon¨® las 100.000 pesetas correspondientes el 22 de diciembre, seis meses despu¨¦s. Lo hizo su esposa, Carolina Portales, seg¨²n consta en la p¨¢gina 412 de la liquidaci¨®n de presupuestos del ejercicio.

Las ordenanzas tambi¨¦n establecen que por la celebraci¨®n de eventos el interesado tiene que pagar 1.300 pesetas por cada asistente siempre que dure m¨¢s de cuatro horas, como este caso, o de 975 si no se supera este tiempo. Pero de este ingreso no hay constancia en la liquidaci¨®n presupuestaria de los ¨²ltimos tres a?os. Aquel mes de julio por ejemplo hubo otras tres bodas oficiadas y celebradas en la finca por las que los contrayentes pagaron 100.000 pesetas por la ceremonia m¨¢s 52.200 pesetas -facturaci¨®n m¨ªnima- por el ¨¢gape.

Consultado por EL PA?S, Jos¨¦ Villalobos, ha asegurado que pag¨® todo lo referente a la organizaci¨®n de la boda, que, asegura, le cost¨® 'una millonada'. Tambi¨¦n ha dicho que el ayuntamiento nunca le ha reclamado nada en estos dos a?os y medio.

En una conversaci¨®n celebrada el mi¨¦rcoles 21, el hermano de la ministra se pregunt¨®: 'Si eso es as¨ª ?d¨®nde est¨¢ la factura, por qu¨¦ nadie me la ha pasado?', y agreg¨® que si en todo caso mantiene alguna deuda con el consistorio, 'la pago y se acab¨®'. Jos¨¦ Villalobos, cirujano de profesi¨®n, se mostr¨® molesto porque asegura que todo lo que hace es mirado con recelo por el hecho de ser hermano de la ministra de Sanidad.

Jos¨¦ Villalobos ha descargado la responsabilidad del posible impago en la empresa de catering que sirvi¨® el banquete de la boda, Do?a Francisquita, restaurante que es proveedor habitual del Ayuntamiento de M¨¢laga. Afirm¨® estar 'absolutamente seguro' de que pag¨® a ¨¦sta tanto el catering como las tarifas por el uso de La Concepci¨®n, aunque no pudo recordar el montante total ni el n¨²mero de invitados -en torno a un centenar-, e indic¨® que cree no tener ya las facturas.

El propietario del restaurante, Jos¨¦ Manuel S¨¢nchez, asegur¨® el jueves 22 a EL PA?S que Jos¨¦ Villalobos le pag¨® a ¨¦l las tasas por el uso de La Concepci¨®n y que su empresa hizo de intermediaria. 'Pienso que est¨¢ pagado, y si no est¨¢ pagado, es porque alguien no ha cumplido o porque el Ayuntamiento no ha pasado la factura', dijo.

S¨¢nchez insisti¨® en exculpar al matrimonio Villalobos, del que dijo en varias ocasiones: 'Desde luego ellos no tienen la culpa'. Preguntado si Do?a Francisquita pudo quedarse con el dinero -ya que asegura que Villalobos pag¨® pero admite que el Ayuntamiento pudo no recibir el ingreso-, asegur¨® que no con rotundidad.

Seg¨²n un agente comercial de Do?a Francisquita, lo habitual es que el pago por el uso de La Concepci¨®n lo haga el cliente directamente, sin que el catering haga de intermediario. En la documentaci¨®n municipal a la que ha tenido acceso EL PA?S no consta que Do?a Francisquita celebrara evento alguno en La Concepci¨®n el 3 de julio, mes en el que s¨ª constan siete banquetes servidos por este restaurante.