Francia traslada de prisi¨®n al etarra Urrusolo por temor a una fuga

Oficialmente no se confirma ni se desmiente el descubrimiento de un plan de fuga. Las fuentes consultadas aducen 'medidas de precauci¨®n' adoptadas por la Administraci¨®n penitenciaria ante 'ciertas informaciones' que apuntaban en esa direcci¨®n. Urrusolo lleva cuatro a?os encarcelado desde su captura, que se produjo en las cercan¨ªas de Burdeos. Las autoridades espa?olas le imputan hasta 18 asesinatos y dos secuestros, por los que tiene pendientes varios procesos de extradici¨®n.

ETA puede necesitar la recuperaci¨®n de militantes experimentados, dado el creciente n¨²mero de jefes de la organizaci¨®n que est¨¢n siendo detenidos en Francia y la aparente imprudencia con que se comportan algunos de ellos. Que el jefe de los comandos operativos, Xabier Garc¨ªa Gaztelu, Txapote, se arriesgara a una cita p¨²blica en la terraza de un caf¨¦ de Anglet con un ciudadano franc¨¦s, tambi¨¦n conocido por su vinculaci¨®n a actividades de ETA, constituye un hecho de dif¨ªcil explicaci¨®n a tenor de las costumbres de una organizaci¨®n clandestina. Esa cita p¨²blica facilit¨® su detenci¨®n.

La actitud mantenida por Urrusolo en sus comparecencias judiciales en Par¨ªs ha sido distinta de la que exhiben otros etarras, como Jos¨¦ Javier Arizkuren, Kantauri; Juan Carlos Iglesias Chouzas, Gadafi, o I?aki Gracia Arregi, I?aki de Renter¨ªa. A diferencia de ellos, Urrusolo acepta el uso del franc¨¦s para sus comparecencias, no exige un int¨¦rprete de euskera, no se niega a contestar al tribunal y no recurre a otras t¨¢cticas dilatorias habituales, como la negaci¨®n de su identidad. Estas diferencias han alimentado especulaciones sobre Urrusolo, pero ninguna informaci¨®n solvente avala la hip¨®tesis de que se haya separado de ETA.

Las autoridades francesas se muestran muy vigilantes tras la fuga consumada de F¨¦lix Alberto L¨®pez de Lacalle, Mobutu, que escap¨® el 13 de noviembre de 2000 del hotel en que viv¨ªa, cuando estaba a la espera de su expulsi¨®n.

Por su parte, las ocho personas detenidas el pasado fin de semana por la Ertzaintza y la Guardia Civil en relaci¨®n con el complejo Donosti de ETA prestar¨¢n ma?ana declaraci¨®n ante la juez de la Audiencia Nacional Teresa Palacios. Seg¨²n informaron fuentes jur¨ªdicas, comparecer¨¢n siete de los 13 detenidos por la Guardia Civil adem¨¢s de E?aut Lerma Usabiaga, arrestado el domingo por la Ertzaintza y acusado de formar parte, junto a I?igo Guridi Lasa y los huidos Asier Arzalluz y Aitor Agirrebarrena, del comando Ttotto, integrado en el complejo Donosti. Los detenidos por la Guardia Civil que declarar¨¢n ma?ana son Edurne Velasco, Juan Manuel Zubillaga, Alberto Larra?aga, Miren Garbi?e Okariz, Paul Alexander Lizarribar y Leire Gallastegi. La juez orden¨® el ingreso en prisi¨®n incondicional de I?igo Guridi, detenido el pasado viernes por la Ertzaintza en Ordizia (Guip¨²zcoa) y al que imputa los asesinatos, a mediados de 2000, de Jos¨¦ Luis L¨®pez de Lacalle y de dos guardias civiles en Sallent de G¨¢llego (Huesca).

La magistrada orden¨® tambi¨¦n el ingreso en prisi¨®n incondicional de tres de los detenidos por la Guardia Civil: Sendoa Etxaiz, Nerea Goikoetxea y Olatz Galarraga, estas dos ¨²ltimas novias de Asier Arzalluz y Aitor Agirrebarrena, los dos presuntos miembros del comando Ttotto huidos. Fuentes jur¨ªdicas informaron de que Etxaiz y Goikoetxea ayudaron a Arzalluz a pasar la frontera con Francia y que Galarraga aloj¨® en su domicilio a Agirrebarrena.

El comando Ttotto ten¨ªa entre sus objetivos inmediatos dinamitar el edificio de El Diario Vasco en San Sebasti¨¢n, situado en el barrio de Igara, seg¨²n la documentaci¨®n incautada a I?igo Guridi. Seg¨²n informa este diario en su edici¨®n de hoy, el comando dispon¨ªa de informaci¨®n detallada sobre el exterior del edificio y sobre la ubicaci¨®n de la garita de vigilancia y el sistema de control de entradas y salidas en el recinto del peri¨®dico, especialmente sobre las horas nocturnas de reparto. Los integrantes del citado comando estudiaban la posibilidad de intentar el acceso al interior del peri¨®dico con el objetivo de colocar diferentes cargas explosivas.