Vaya con el numerito
Hay una ley llamada de Venturi que dice que un fluido que pase de un tubo a otro de secci¨®n m¨¢s estrecha aumentar¨¢ su velocidad. Lo que explica la de tonter¨ªas que corren en campa?a o, perd¨®n, precampa?a electoral, pero no porque haya m¨¢s sino porque vienen a mayor velocidad, dado que pasan de un marco m¨¢s ancho a uno muy restringido en el tiempo. Lo digo para que se preparen a una m¨¢s pero de n¨²meros. Durante todo el a?o solemos seguir regularmente pegados a las letras, aunque s¨®lo sea para pagar el coche o establecer la lista de la compra, porque ya me van a decir qu¨¦ otro contacto con ellas puede tener un pa¨ªs donde en m¨¢s de la mitad de los hogares no entra un libro y, en pocos menos, un peri¨®dico aunque sea deportivo. Con los n¨²meros la cosa se pondr¨ªa a¨²n peor de no ser por la Primitiva y las peri¨®dicas citas con la urna. Y ah¨ª quer¨ªa llegar. ?Cu¨¢ndo, si no es en elecciones, tratamos a los porcentajes como si fueran de la familia?
De hecho, no volvemos a tocar luego uno hasta los pr¨®ximos comicios, pero es igual, ocurre como con el montar en bicicleta, basta con subirse una vez a un porcentaje para que no se olvide jam¨¢s. Compru¨¦benlo. Se acaba de publicar una encuesta que prepara mucho lo propiamente electoral, ya que se refiere a los h¨¢bitos de lectura de la prensa diaria. El estudio muestra que la gente no est¨¢ tan polarizada como quiere Ibarretxe a fin de ofrecerse como una suerte de Redentor (pero sin cruz) capaz de soldar la hipot¨¦tica fractura por medios tan ilusorios como los que subyacen a su diagn¨®stico. Y no est¨¢ tan polarizada porque, independientemente de lo que voten, los ciudadanos leen -leemos- b¨¢sicamente lo mismo, excepci¨®n hecha de los m¨¢s irredentos, pero ¨¦stos polarizan todav¨ªa mucho menos. Pues bien, leer b¨¢sicamente lo mismo, sobre todo cuando no expresa las propias convicciones, ayuda a relativizarlas y, por consiguiente, a descrispar.
Cosa estupenda si no fuera porque ese pasto de lectura com¨²n consiste b¨¢sicamente en f¨²tbol y en ese otro deporte de la cosa local -esquelas incluidas, silvupl¨¦-, mientras que lo puramente pol¨ªtico o de opini¨®n interesa s¨®lo a un magro 8%. Pero no nos alarmemos, porque tambi¨¦n tiene su lado bueno, ya que sirve para bajar las implas a unos pol¨ªticos que se creen el ombligo del mundo cuando, bien mirado, s¨®lo deber¨ªan ser su p¨ªloro o, como mucho, su media docena de hormonas. Y tambi¨¦n vale para quitarnos a los practicantes de columna la responsabilidad e incluso la lumbalgia. Podr¨ªa poner a caer de un burro ahora mismo a cualquiera sin que se enterase. Es m¨¢s, puedo meterme conmigo mismo sin que me importe un pito, ya que no me leer¨¦. De hecho puede que hasta no haya escrito nada porque, si no me leo, ?c¨®mo saberlo? Una vez lo hice, me refiero a no escribir nada, s¨®lo que, contra toda probabilidad, me toc¨® leerlo; ?qu¨¦ quieren, un 8% ser¨¢ poco pero es! M¨¢s vale que no hab¨ªa escrito nada, porque me hubiera visto muy nihilista. O huero. Qu¨¦ m¨¢s da, si tampoco lo han le¨ªdo.
As¨ª est¨¢n las cosas. Hab¨ªa prometido n¨²meros y s¨®lo he logrado montarme uno. Y qu¨¦ numerito. De modo que voy a ver si les dejo con un problema a fin de que vayan aguzando su olfato matem¨¢tico para que no se la den electoralmente con queso. Si le dieran a elegir entre la posibilidad de recibir 800.000 pesetas en mano y optar a un mill¨®n en un sorteo con un 85% de probabilidades a su favor, ?qu¨¦ escoger¨ªa? Para su consuelo les dir¨¦ que la gente suele preferir la primera alternativa pese a que la segunda le ofrece una media de 850.000 pesetas de ganancia. Sin embargo, la tendencia se invierte si en vez de plantear el problema en t¨¦rminos de provecho se hace en t¨¦rminos de p¨¦rdida, pese a que haya que pagar m¨¢s. Lo que demuestra que las matem¨¢ticas ser¨¢n exactas pero nuestra percepci¨®n de los n¨²meros no pasa del voluto.
Dicho esto, ah¨ª van los datos de cierto sondeo anunciador de un curioso ganapierde. PNV m¨¢s EA ganar¨ªan las elecciones, pero no podr¨ªan gobernar puesto que sus 26 esca?os -32% de los votos- quedar¨ªan por debajo de los 34 -37% de votos- que sumar¨ªan los perdedores PSE y PP. ?Por qui¨¦n apostar¨ªa usted?
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