Catalanismo a la carta para el siglo XXI
Historiadores, economistas, polit¨®logos y fil¨®sofos dibujan en un libro un futuro con denominador federal
?C¨®mo ser¨¢ el catalanismo del siglo XXI? ?Federal, soberanista, autonomista, identitario, cultural? ?Simplemente posnacionalista?
Diez expertos abordan desde diferentes ¨¢mbitos su visi¨®n del catalanismo a la carta, un vi¨¢tico pol¨ªtico-ideol¨®gico para circular por el siglo que empieza. El compendio lleva por t¨ªtulo El nou catalanisme (Ariel, marzo de 2001) y ayer fue presentado por 8 de sus 10 autores: historiadores, antrop¨®logos, economistas, soci¨®logos, fil¨®sofos y polit¨®logos. S¨®lo faltaron a la cita Xavier Rubert de Vent¨®s y Manuel V¨¢zquez Montalb¨¢n. Los presentes exhibieron un denominador com¨²n a partir del federalismo: m¨¢s asim¨¦trico (o plural) para unos y m¨¢s bien cl¨¢sico para otros. Todo ello en un tono de correcci¨®n inequ¨ªvocamente catal¨¢n.
Miquel Caminal, profesor de Ciencia Pol¨ªtica, dibuj¨® tres catalanismos: el federal, el nacionalista y el pujolista. 'El nacionalismo ha permeabilizado cada uno de estos tipos', dijo, 'y ello ha permitido que el catalanismo se distancie de la autodeterminaci¨®n'. De hecho, la tradici¨®n autodeterminista s¨®lo ha contado con tres figuras: Francesc Maci¨¤, de primera ¨¦poca; Dom¨¨nec Mart¨ª Juli¨¤ (pol¨ªtico y m¨¦dico de finales del siglo XIX y principios del XX), y ?ngel Colom en su inicio como l¨ªder de Esquerra Republicana (ERC). 'Tengo serias dudas sobre la existencia de m¨¢s', dijo un concluyente Caminal.
Con un federalismo m¨¢s marcado -asim¨¦trico para unos, plural para otros-, Ferran Requejo, profesor de Ciencia Pol¨ªtica, se encarg¨® de advertir de los peligros del patriotismo constitucional de J¨¹rgen Habermas. 'El catalanismo no debe caer eso', subray¨® un Requejo que no ocult¨® su preferencia por el modelo de federalismo plural, pensado desde la plurinacionalidad.
El soci¨®logo Salvador Giner situ¨® el catalanismo en una encrucijada y subray¨® la falta de vigor de la burgues¨ªa catalana. La mala salud de esa otrora paradigm¨¢tica clase social provoca inquietud, y ello hizo que algunos dudaran del futuro del catalanismo: ?C¨®mo se extender¨¢n esas ideas en el siglo XXI si en el futuro no sobreviven los grupos medi¨¢ticos catalanes?
En un mundo globalizado, tal como expuso el fil¨®sofo Norbert Bilbeny -coordinador del libro junto al historiador ?ngel Pes-, cambiar¨¢n muchas cosas. Mutar¨¢ el concepto de hecho diferencial y quiz¨¢ desaparecer¨¢ el victimismo. 'En filosof¨ªa no s¨¦ si Catalu?a se ha significado por realizar grandes aportaciones, pero el catalanismo es un debate filos¨®fico, no un nacionalismo armado', asegur¨® Bilbeny.
Un nacionalismo con connotaciones negativas en cuanto a denominaci¨®n (nazismo, Balcanes...), record¨® ?ngel Pes. El economista Antoni Castells, en esa l¨ªnea, abog¨® por enterrar glorias de pasado y afrontar el proyecto de futuro: ?Qu¨¦ tipo de Estado necesitamos?, se pregunt¨®. La antrop¨®loga Maria Jes¨²s Bux¨® dio una respuesta m¨¢s civil. Sugiri¨® que los pol¨ªticos dejen de secuestrar la cultura, que no abusen de la etnicidad y que el catalanismo se replantee en t¨¦rminos individuales. Catalanismo, pues, a la carta para el siglo XXI.
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