Francia mide la depresi¨®n de Espa?a
Un nuevo fracaso de la selecci¨®n da?ar¨ªa de manera irreparable el proyecto actual
Espa?a se mide esta noche con Francia (Mestalla, 21.30, TVE-1) en una situaci¨®n m¨¢s cr¨ªtica de lo que parece. No se duda de la clasificaci¨®n de Espa?a para el Mundial del pr¨®ximo a?o, pero eso est¨¢ en la paga. Los problemas son de otra naturaleza. Espa?a ha perdido en los ¨²ltimos meses contra Alemania, Holanda e Inglaterra. A estos equipos, les ha marcado dos goles. Ha recibido nueve. Si los resultados no dicen todo del f¨²tbol, a veces dicen muy poco, en este caso abundan sobre la idea de un equipo deprimido. Trasladado a la jerga econ¨®mica, Espa?a ha entrado en una fase de recesi¨®n.
De la gravedad del enfermo nos podremos enterar hoy. La gente mira a la selecci¨®n con escepticismo, o descree abiertamente. Ha sido una ca¨ªda brusca que obliga a pensar en una crisis. No hay acuerdo sobre las causas. Puede que falten jugadores, o que Camacho haya perdido la capacidad de liderazgo, o que se necesite una renovaci¨®n, o que el equipo no est¨¢ atento a los detalles que muchas veces sirven para perder partidos. Cualquiera que sea la reflexi¨®n, lo que nadie discute es que otro fracaso da?ar¨ªa de manera irreparable al proyecto actual. De ah¨ª, la trascendencia del encuentro con Francia.
Francia es un equipo con glamour frente a otro que pide demasiadas excusas. Durante los ¨²ltimos meses se ha repetido hasta la saciedad eso de que 'no hemos ganado a nadie' y frases as¨ª. Lejos de producir un efecto de superaci¨®n, la gente ha terminado por aceptar la timidez de los mensajes. El resultado es que nadie se cree de verdad que Espa?a sea capaz de competir con los mejores, y esa consideraci¨®n se vuelve m¨¢s humillante en el estado actual de nuestro f¨²tbol, con unos equipos que son la envidia de Europa.
Por mucho que la selecci¨®n haya ganado pocas cosas, es frustrante la cabizbaja imagen que se pretende dar del f¨²tbol y los futbolistas espa?oles. Como poco, produce depresi¨®n por contagio. Jugadores que se sienten decisivos en sus clubes, asumen con demasiada naturalidad un perfil bajo en el equipo nacional. Lo que se pod¨ªa interpretar como falsa modestia se ha convertido en modestia real, y quiz¨¢ por esta raz¨®n han llegado los p¨¦simos resultados. Es curiosa la psicolog¨ªa del f¨²tbol. Se tiene a Francia como un equipo extraordinario, con jugadores maravillosos. A algunos de ellos, y muy importantes, les hemos visto de cerca y han pasado desapercibidos. De los que ya no est¨¢n, Blanc no fue titular en el Bar?a y Deschamps tampoco lo es en el Valencia. De los de ahora, Dugarry sali¨® a paso r¨¢pido del Bar?a, igual que Karembeu del Madrid. A Petit se le conoce por sus largos calentamientos en la banda. Sin embargo, en la selecci¨®n francesa se consideran superjugadores. Se lo creen, y funciona.
Al equipo y al seleccionador les corresponde cambiar de estrategia. Tendr¨¢n que hacerlo desde hoy, porque ser¨¢ muy dif¨ªcil digerir una nueva decepci¨®n. Espa?a tendr¨¢ que confiar firmemente en su juego y en la calidad de sus futbolistas. Tendr¨¢ que actuar sin complejos y con intensidad. De lo contrario, la impresi¨®n se convertir¨¢ en certeza: la selecci¨®n ha sido conducida a un tercer plano.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.