EE UU abandona el Tratado que firm¨® en 1998

Bill Clinton, el antecesor de Bush en la Casa Blanca, anunci¨® a bombo y platillo en 1998 la firma del Protocolo de Kioto por parte de EE UU. Fue durante la cumbre del clima de Naciones Unidas celebrada en Buenos Aires. Clinton advirti¨® de que no ten¨ªa intenci¨®n de someter el documento a la ratificaci¨®n parlamentaria, -sab¨ªa que no tendr¨ªa el apoyo suficiente- pero utiliz¨® esta advertencia como medida de presi¨®n en las negociaciones internacionales sobre los detalles de cumplimiento del Protocolo de Kioto, aprobado en 1997.

Las negociaciones sufrieron su mayor rev¨¦s en noviembre del a?o pasado -desde que comenz¨® el proceso en 1995- en la cumbre de La Haya, que qued¨® suspendida debido a las posturas divergentes entre EEUU y la UE y que se reanudar¨¢ en Bonn.

Washington, que hasta ahora ha defendido el Protocolo de Kioto, nunca ha querido limitaciones en las condiciones de su cumplimiento. Seg¨²n el acuerdo tiene que reducir sus emisiones para 2008-2012 en un 7% respecto al nivel de 1990. Pero quiere tener libertad para utilizar todos los mecanismos de flexibilidad que se aprobaron en Kioto. As¨ª, mientras la UE defiende que un gran porcentajedel recorte de emisiones se haga mediante medidas internas de cada pa¨ªs, EE UU no quiere barrera alguna para poder recurrir a la compra de cupos de emisi¨®n que le sobren a otro pa¨ªs, o a los programas tecnol¨®gicos limpios, recursos que recoge el protocolo.

En la Haya aflor¨® otra antigua pretensi¨®n estadounidense: la contabilizaci¨®n de los llamados sumideros de di¨®xido de carbono (bosques y plantaciones) de la forma m¨¢s beneficiosa para sus intereses. La UE se opuso a la exigencia de EE UU (representados por la Administraci¨®n Clinton). Tampoco se lleg¨® a un acuerdo sobre condiciones del cumplimiento del Tratado y sanciones en caso de transgresi¨®n.

La Administraci¨®n Bush ahora vuelve a destacar una antigua exigencia suya: que los pa¨ªses en v¨ªas de desarrollo (fundamentalmente China, India y Brasil) se comprometan a reducir sus emisiones en el primer per¨ªodo del protocolo, es decir, en el plazo 2008-2012, del que est¨¢n excluidos.

Esta cuesti¨®n es rechazada de plano por los pa¨ªses en desarrollo bajo el argumento de que son las emisiones hist¨®ricas, las generadas por los pa¨ªses desarrollados durante su industrializaci¨®n las que han generado el problema del calentamiento global. Por tanto, esos pa¨ªses exigen que ahora paguen los platos rotos los que han creado el problema, y luego, m¨¢s adelante, tomar¨¢n ellos mismos medidas. La UE est¨¢ de acuerdo con esta postura de los pa¨ªses en desarrollo.