'Hay que saber adaptarse y ganar terreno d¨ªa a d¨ªa'

El presidente del Bar?a, Joan Gaspart, ha dicho: 'Llegado el remoto caso de que Serra Ferrer decida que hay que cambiar de entrenador, ser¨¢ ¨¦l quien elija'.

Pregunta. ?Qui¨¦n le gusta m¨¢s: C¨²per o prefer¨ªa a Wenger?

Respuesta. Son dos grandes entrenadores con criterios diferentes. En el f¨²tbol, todo es relativo, y tambi¨¦n los juicios de opini¨®n.

P. En calidad de director t¨¦cnico, a usted le tocar¨¢ decidir, en caso de que no contin¨²e como entrenador la pr¨®xima temporada, y parece que C¨²per ser¨ªa el elegido.

R. Dar¨¦ mi opini¨®n en el momento y el lugar adecuado.

P. ?No se siente menospreciado cuando le preguntan m¨¢s sobre los dem¨¢s que sobre usted?

R. Procuro no distraerme. Lo que pienso lo interiorizo. Tengo mucha ilusi¨®n en la oportunidad que me han dado y s¨¦ las dificultades que comporta ejercerla.

'Cuando una persona es moderada, natural y sencilla, parece fuera de contexto'

P. Pese a ser elegido como un entrenador de consenso, ahora corre el riesgo precisamente de ser considerado un entrenador que no aprovech¨® su oportunidad.

R. S¨®lo puedo presumir de mi trabajo. Soy modesto. Para los juicios est¨¢n otros, pero constato que tras las elecciones cambi¨® pr¨¢cticamente toda la manera de funcionar del club y cada uno tiene su opini¨®n. Para unos, es una temporada de transici¨®n; otros dicen que si no ganamos un t¨ªtulo ser¨¢ un fracaso; el presidente coment¨® que deb¨ªamos lograr cinco trofeos. Afrontamos una situaci¨®n que tiene un poco de continua improvisaci¨®n.

P. ?Qu¨¦ objetivos tiene el Bar?a?

R. Al entrenador no hace falta que le digan cu¨¢les son. Hay que ganar hasta el partido de entrenamiento del jueves. Est¨¢ bien marcar unas metas para darles apoyo desde los estamentos del club y proporcionar una l¨ªnea de actuaci¨®n de manera que el trabajo tenga credibilidad. Lo que no puede haber son recuentos parciales. Hay que aguardar al final.

P. ?El adi¨®s a la Liga de Campeones y la mala situaci¨®n en la Liga no obligan a un inventario?

R. La Liga de Campeones es el trofeo por excelencia, pero no deber¨ªamos desmerecer la Copa de la UEFA. Nosotros, por ejemplo, eliminamos al Brujas, un equipo que en aquel momento era el l¨ªder de la Liga belga, por delante del Anderlecht, rival del Madrid. Nos eliminaron de la m¨¢xima competici¨®n continental siendo los m¨¢ximos goleadores. Pero supimos afrontar la situaci¨®n, dimos un paso al frente, y ahora estamos en una Copa de la UEFA de nivel muy alto.

P. El equipo, sin embargo, ha sido muy irregular.

R. Al inicio de temporada s¨ª, pero ahora es m¨¢s fiable. Con el paso de los partidos, el Barcelona ha ido ofreciendo un juego ligado, bien elaborado, sin pelotazos a la olla, con singularidad, llegando a trav¨¦s de los extremos. En la Copa, por ejemplo, mostramos el grado de humildad que no tuvieron otros para superar rivales de inferior categor¨ªa, y estamos en semifinales, cosa que en otros tiempos hubiera sido excitante. Y en la Liga estamos donde estamos por nuestra irregularidad y porque en el f¨²tbol hay ciertas cosas y un punto de azar que, seg¨²n se d¨¦, te colocan a tres puntos del primero o a nueve. Por citar alg¨²n partido, frente al Numancia generamos 12 ocasiones de gol y contra el Mallorca y en Madrid, el equipo hizo todo lo que se le pod¨ªa exigir para ganar con autoridad, personalidad y jugando al f¨²tbol; sin embargo, el marcador nos neg¨® unos puntos. Las lesiones de jugadores como Guardiola, l¨ªder natural y espiritual del equipo; Kluivert, Overmars, Luis Enrique, tambi¨¦n trastocaron nuestro arranque. Y en el Madrid, el Deportivo o el Valencia, el entrenador ya llevaba un tiempo trabajando. Pero con todo, y con lo que supone un cambio como el vivido en el club, no estoy descontento.

P. Por su discurso, parece que usted va por libre, dispuesto a ser el saco de los golpes; el comod¨ªn de la junta; un escudo para la plantilla, resign¨¢ndose a que se le juzgue bajo la premisa de si el equipo le viene grande o no.

R. No ir¨¦ contra mis principios. Primero est¨¢ el club y despu¨¦s los jugadores. Los entrenadores somos personas que ayudamos al jugador a hacer algo mejor lo que por s¨ª solos ya saben hacer. Ocurre, sin embargo, que cuando una persona es moderada, sencilla, natural, prudente, parece como si estuviera fuera de contexto. En nuestro querido club a veces da la sensaci¨®n de que las declaraciones tienen que ser espectaculares; se ha de mover la cola; es conveniente almorzar con gente que genera opini¨®n. ?Por qu¨¦? Yo creo en otras cosas. Pretendo apoyar a los jugadores, hacer que se sientan tranquilos y seguros. Me sentir¨ªa feliz si pudiera coordinar y cohesionar el talento y la fuerza del plantel.

P. ?No cree que, adem¨¢s de la capacidad del entrenador, se debate sobre la fecha de caducidad de la plantilla y sobre un estilo de juego que algunos creen superado?

R. La cultura futbol¨ªstica del Bar?a no se puede cambiar nunca. Hay un sello que todo entrenador debe respetar porque distingue al club y activa el orgullo del aficionado. Hay cosas que marcan y nos distinguen: el organizador, los extremos, salir jugando la pelota desde la defensa. El hincha barcelonista es muy exigente tanto en el juego como en los resultados, y hoy hay 10 equipos capaces de ganar la Liga de Campeones. No es f¨¢cil ser singulares y competitivos. Por eso reclamo humildad.

P. Los valores a los que se refiere no est¨¢n en contradicci¨®n con la organizaci¨®n del club. El Bar?a nunca ha sido humilde y sencillo, sino m¨¢s bien complicado y con tendencia a la prepotencia.

R. Admiro la sencillez y la naturalidad. De Guardiola, por ejemplo se dice: qu¨¦ f¨¢cil lo hace. En el f¨²tbol, lo d¨ªficil es hacer lo f¨¢cil. Un entrenador tiene que intentar aplicar el sentido com¨²n, cosa dif¨ªcil ante el montaje que rodea al f¨²tbol. Los sistemas los hacen buenos o malos los jugadores. Lo que ocurre es que la autoexigencia de un jugador nunca puede ser m¨¢s baja que la del aficionado m¨¢s exigente.

P. ?C¨®mo definir¨ªa su situaci¨®n hoy y sus sensaciones?

R. M¨¢s que las ideas que impones, en el f¨²tbol mandan las circunstancias. Hay que saber adaptarse a ellas e ir ganando terreno d¨ªa a d¨ªa. Creo que lo voy consiguiendo. No s¨¦ si la pr¨®xima temporada ser¨¦ el mismo Serra Ferrer que ¨¦sta. Cuando hay marejada, el barco puede hacer unas cosas, y cuando la mar est¨¢ llana, puede hacer otras, El patr¨®n y el barco son los mismos, pero las circunstancias son diferentes. A veces no se puede avanzar y hay que aguardar al buen tiempo para apretar fuerte.

P. Usted aval¨® el fichaje de Rivaldo, del que ha dicho: 'Sin ¨¦l, no s¨¦ d¨®nde estar¨ªamos' ?El brasile?o es intransferible?

R. El Barcelona se equivocar¨ªa si lo traspasara. No hay en el mundo del f¨²tbol un talento como el suyo. Ocurre, sin embargo, que es un crack discreto y no alardea de haberle marcado tres goles al Milan, todo lo contrario de lo que har¨ªa alg¨²n otro. Incluso en Torrelavega se arremang¨® en el fango y marc¨®. A Rivaldo le faltan esas cosas que rodean al juego para que el p¨²blico lo adore, pero el Bar?a har¨ªa mal negocio si lo vendiera.

P. Rivaldo aporta gol en un equipo muy ofensivo. Defensivamente, sin embargo, se conceden demasiadas ocasiones. ?Al Bar?a le falta car¨¢cter competitivo?

R. El nivel ha sido muy bueno cuando hemos podido disponer de un once tipo. Si hoy tuvi¨¦ramos cinco o seis puntos m¨¢s, que son los que nos hemos ganado en el campo, no pasar¨ªa nada de cuanto sucede. Es cierto, por otra parte, que no todos los jugadores reaccionan igual ante la adversidad. A m¨ª me gustan los que se cabrean por perder, ambiciosos, que se endurecen desde j¨®venes, dispuestos a aguantar la presi¨®n. Nosotros jugamos a ganar porque el equipo est¨¢ confeccionado en un 75% para atacar. Si adem¨¢s tuvi¨¦ramos concentraci¨®n y picaresca para defender, habr¨ªamos encontrado el equilibrio. Pero esto no se consigue en una temporada. Es cuesti¨®n de ganarle terreno cent¨ªmetro a cent¨ªmetro a una situaci¨®n. Hemos progresado mucho con el tiempo y el equipo crece a un buen nivel. El problema es que estamos pagando una factura demasiado cara por lo sucedido al inicio. Al Bar?a, adem¨¢s, los rivales le tienen fotografiado, de manera que tenemos que aumentar los recursos. Nuestra velocidad de bal¨®n y capacidad de desbordar por las bandas ha aumentado notablemente. Y hay que admitir tambi¨¦n que hay nuevos jugadores: Reina, Gabri como lateral; Xavi ha respondido siempre que se le necesit¨®.

P. ?Hasta qu¨¦ punto decidi¨® la lista de altas y bajas?

R. Contribu¨ª dando mi opini¨®n. Fue todo muy deprisa y corriendo en una temporada tan at¨ªpica que yo, un lunes, por ejemplo, pod¨ªa ser entrenador, seguir de director t¨¦cnico o me pod¨ªan echar.

P. ? Ya est¨¢ trabajando para la pr¨®xima temporada?

R. S¨ª, otra cosa es que me hagan caso, pero quiero tener mi conciencia tranquila y mi deber profesional cumplido.