La m¨²sica es cultura est¨¦ donde est¨¦

No soy m¨²sico, pero he colaborado con ellos vendiendo sus trabajos desde los a?os ochenta. En aquella ¨¦poca, con El carnavalito humahuaque?o; ahora, con el Adagio de Albinoni o el Concierto de Aranjuez.

He visto a millones de personas, de todas las partes de Espa?a y del mundo, muy agradecidas y maravilladas, contemplando, libre y gratuitamente, mientras pasean o toman algo en las terrazas, a un grupo de artistas interpretando piezas tan bonitas en un marco incomparable.

Entonces, ?qu¨¦ mal hacen? Si los pintores tienen el derecho a estar ah¨ª desarrollando su trabajo y busc¨¢ndose la vida, digna y tranquilamente, ?por qu¨¦ no lo pueden hacer los m¨²sicos?

El problema radica en que no est¨¢n regularizados ni legalizados, ni respetados como los pintores, y esto le ata?e s¨®lo a las autoridades competentes, que deber¨ªan dar los permisos y fijar unos horarios de acuerdo con estos artistas para que pudieran desempe?ar esa labor bell¨ªsima: alegrar la plaza y que ¨¦sta no se convierta en una jungla agobiante, ni para el vecindario ni para los turistas ni para los propios m¨²sicos. Estas autoridades deben tener en cuenta que los m¨²sicos no van tampoco para pasar el rato o para sacar para una juerga, sino que de ellos tambi¨¦n depende una familia.-