Resabios machistas

Mal se puede acabar con la plaga de la violencia dom¨¦stica si desde la justicia se minimizan las agresiones sexuales o desde la televisi¨®n se toleran comportamientos agresivos con su pareja por parte de alg¨²n concursante en determinado programa. Si las actitudes machistas, generadoras de violencia contra la mujer, siguen teniendo alguna forma de comprensi¨®n por parte de los jueces o se proponen a las grandes audiencias como modelos a seguir, no habr¨¢ modo de evitar que se sigan transmitiendo de generaci¨®n en generaci¨®n.

La sentencia de la Audiencia de Barcelona que ha impuesto la pena m¨ªnima al violador de una joven de 13 a?os -un polic¨ªa nacional que utiliz¨® la amenaza del arma reglamentaria para consumar su tropel¨ªa-, con el argumento de que la v¨ªctima ten¨ªa alguna experiencia sexual, es un disparate y una invitaci¨®n a los potenciales agresores para que sigan abusando de su fuerza f¨ªsica o de su poder frente a la mujer. Como lo ha sido otra reciente sentencia de la misma Audiencia que absolvi¨® a un padre, violador reiterado de su hija menor, porque no pudo probarse el rechazo de la v¨ªctima. Aunque sean excepci¨®n, este tipo de resoluciones causan un severo da?o a la credibilidad de las mejoras introducidas recientemente en los procesos por malos tratos para proteger m¨¢s eficazmente a la v¨ªctima e impedir la impunidad del agresor.

No menos grave es que en un programa televisivo de gran audiencia se minimice la actuaci¨®n agresiva para con su pareja de un concursante y s¨®lo se decida expulsarle del programa ante la avalancha de peticiones en ese sentido por parte de partidos pol¨ªticos y de entidades sociales. En todo caso, habr¨ªa sido todav¨ªa m¨¢s grave que ese comportamiento hubiera sido inducido por motivos de audiencia. Pero, m¨¢s all¨¢ de la conducta individual, hay que preguntarse por qu¨¦ personas j¨®venes, educadas en una sociedad m¨¢s tolerante e igualitaria en las relaciones personales y familiares, siguen actuando frente a su pareja seg¨²n estereotipos del m¨¢s rancio machismo.

El agresor de la ¨²ltima v¨ªctima mortal por violencia dom¨¦stica -una mujer que eleva ya a 15 el n¨²mero de fallecimientos por esta causa en lo que va de a?o- es un hombre de 24 a?os que no pudo soportar su rechazo amoroso y reaccion¨® con la ancestral actitud de 'o m¨ªa o de la tumba fr¨ªa'. En nuestra sociedad siguen perviviendo, a veces bajo una p¨¢tina de modernidad, actitudes que tienden a suponer una provocaci¨®n en la mujer agredida, un derecho por parte del agresor, un d¨¦bito por parte de la mujer hacia el macho y una especie de propiedad del marido respecto a la esposa. Ello explica que el n¨²mero de mujeres asesinadas por sus maridos o ex maridos, novios o ex novios siga en aumento, y que los planes y reformas legales contra la violencia dom¨¦stica no basten para erradicarla.