La c¨²pula militar de Per¨² dimite y condena el golpe de Fujimori

En un mensaje dirigido al pa¨ªs, que los propios firmantes califican de 'gesto de franca e hist¨®rica rectificaci¨®n', los generales de la c¨²pula militar reconocen la utilizaci¨®n de las instituciones armadas para fines il¨ªcitos por parte del pr¨®fugo Vladimiro Montesinos, que manej¨® desde la sombra los resortes del poder.

El paso dado por los miembros del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas deja v¨ªa libre al presidente provisional y comandante supremo, Valent¨ªn Paniagua, para que proceda a la esperada destituci¨®n de los principales jefes militares. Y es la consecuencia del 'pacto de honor' que firmaron secretamente el 13 de marzo de 1999 unos 2.000 jefes y oficiales, por orden de Montesinos y el alto mando, para garantizar la impunidad de los uniformados que cometieron actos delictivos. Los v¨ªdeos difundidos recientemente en el Congreso de la Rep¨²blica muestran el siniestro acto realizado hace dos a?os en la base a¨¦rea de Las Palmas, en el que la oficialidad superior de las Fuerzas Armadas y la Polic¨ªa Nacional suscribe un acuerdo de honor de 'acatamiento imperativo' que apoya el golpe de 1992, que cerr¨® el Congreso y anul¨® la Constituci¨®n, y asegura la amnist¨ªa general para todos aquellos uniformados implicados en violaciones de derechos humanos.

Bajo el escudo del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, el general Pablo Carbone, jefe de la Fuerza A¨¦rea, ley¨® el comunicado en compa?¨ªa del general Carlos Tafur, jefe del Ej¨¦rcito; el vicealmirante V¨ªctor Ramos, jefe de la Marina, y el general Armando Santisteban, director general de la Polic¨ªa Nacional. Hoy piden disculpas al pueblo peruano; hace dos a?os, estos mismos jefes estamparon su firma en un pacto vergonzoso que pretend¨ªa garantizar la continuidad de un r¨¦gimen corrupto.

Los generales afirman en su declaraci¨®n que 'la violencia terrorista fue utilizada como pretexto por el Gobierno de facto a partir de abril de 1992 para sobredimensionar el SIN [Servicio de Inteligencia Nacional] y someter al control absoluto de ¨¦ste todos los ¨®rganos de poder constitucional', y a?aden que el presidente Fujimori permiti¨® la progresiva injerencia de Vladimiro Montesinos y denuncian 'el grave proceso de cooptaci¨®n, sujeci¨®n y corrupci¨®n que afect¨® no s¨®lo a las Fuerzas Armadas, sino a toda la sociedad'.

Para los generales que ahora anuncian su dimisi¨®n, aquel pacto de honor fue firmado 'sin debate previo', en forma 'intimidatoria y coercitiva', por lo que no debe ser respetado. 'No expresa la libre voluntad de los firmantes y viola la Constituci¨®n', dice el comunicado de la c¨²pula militar actual. 'Las Fuerzas Armadas y la Polic¨ªa Nacional de Per¨²', a?ade, 'en solemne e inequ¨ªvoco gesto de rectificaci¨®n, declaran su rechazo y condena a la ruptura del orden constitucional del 5 de abril de 1992 y de todo acto y compromiso que podr¨ªa menoscabar las bases ¨¦ticas y jur¨ªdicas del Estado de derecho, y lamentan que alguno de sus miembros incurriera en infracciones personales'.

Los dimisionarios proclaman ahora su 'firme determinaci¨®n de actuar con estricto respeto a las leyes de la Rep¨²blica' y su 'compromiso de respetar los derechos humanos, fortalecer los valores morales y combatir cualquier indicio de corrupci¨®n'. Todo lo contrario de lo que ha sido el comportamiento de los militares peruanos desde el golpe de 1992. Ahora dicen respaldar las iniciativas para la formaci¨®n de una Comisi¨®n de la Verdad 'que permita la reconciliaci¨®n nacional fundada en la justicia'.