El Unicaja entra en la historia europea

No hubo vuelco. Se impuso la l¨®gica. El Unicaja mantuvo sin apuros, en Vrasc, los valios¨ªsimos 30 puntos de ventaja que hab¨ªa conseguido en el turno de ida de la final de la Copa Korac y ya tiene un t¨ªtulo de campe¨®n, el primer trofeo que aforma sus vitrinas y el primero tambi¨¦n para un representante del baloncesto andaluz. Lo ha logrado precisamente en el mismo torneo en el que lo perdi¨® el a?o pasado y, tal y como hizo entonces su verdugo, el Limoges, franc¨¦s, redujo la final a un solo partido. Tan dura fue aquella experiencia que ayer decidi¨® dar una lecci¨®n de autoridad. Y eso es lo que hizo.

El Unicaja acab¨® en aut¨¦ntico campe¨®n y consigui¨® tambi¨¦n la victoria en el partido de vuelta. La logr¨® no porque la buscara, sino porque pens¨® en el t¨ªtulo. La principal virtud del equipo de Bozidar Maljkovic fue no perder la compostura en ning¨²n momento ni entregarse al ritmo fren¨¦tico que propusieron los yugoslavos. Daba igual ir por delante o por detr¨¢s en el marcador siempre que la cosa no se saliera de madre.

El quinteto titular que dispuso el entrenador serbio, alguien a quien adora la afici¨®n de Vrsac, incluy¨® a tres hombres bajos, pero que se fajan en la defensa -Berni Rodr¨ªguez, Sonko y Cabezas- para frenar el tiro exterior del Hemofarm, su arma m¨¢s potente. Consigui¨® con ello el Unicaja su primer objetivo: impedir un arranque en tromba del rival, aplacar la tensi¨®n y enfriar el ambiente.

El Unicaja oblig¨® a su adversario a ralentizar el juego y disputar el partido en la corta distancia. Sin posibilidad de ganar desde el per¨ªmetro, el Hemofarm encontr¨® en las penetraciones de Savic una v¨ªa para, al menos, anotarse un triunfo parcial, consolador, honroso. El objetivo del entrenador local, el histri¨®nico Lukajic, era derrotar por una vez al maestro Maljkovic. Pero el Unicaja no se descompuso y su contendiente nunca consigui¨® irse en el marcador con m¨¢s de siete puntos de margen.

As¨ª que en la segunda parte los yugoslavos optaron por emplearse en una dur¨ªsima defensa. Mrsic, Abrams o Phillips sufrieron un verdadero calvario. Pero Weis ayud¨® de nuevo a imponer la autoridad del juego interior y, poco a poco, el Unicaja se encontr¨® en el ¨²ltimo minuto con la posibilidad de vencer. As¨ª, con la estrategia del desgaste, de la constancia, ya ha ganado Unicaja varios encuentros esta temporada. Tambi¨¦n el de ayer para que nadie pusiera en duda al campe¨®n.

Con este t¨ªtulo, el Unicaja consigue uno de sus objetivos de la temporada tras el frustrado intento en la Copa del Rey. Ahora pretende jugar la Euroliga y para ello deber¨¢ alcanzar las semifinales de la Liga ACB.