'Verdi es el pan de los coros'
Lleg¨® a Espa?a sabiendo decir hola y adi¨®s. La primera vez que le propusieron formar un coro de ¨®pera para el Teatro Real tuvo que utilizar los dos t¨¦rminos porque lleg¨® atendiendo a una propuesta que no cuaj¨®. La segunda fue en la temporada pasada. Todav¨ªa no se ha marchado. Martin Merry es un ingl¨¦s alto como un chopo de un pueblecito cercano a Birmingham que no quiere desvelar su edad. S¨®lo habla de los a?os y las gracias de su criatura: tiene apenas dos primaveras y ya canta como los ¨¢ngeles. Se llama Coro de la Orquesta Sinf¨®nica de Madrid y triunfa por todas las esquinas. El secreto: 'Juventud, que todos sepan m¨²sica y hacer mucho Verdi, porque ¨¦l es el pan de los coros', cuenta Merry.
La primera vez que el Coro de la Orquesta Sinf¨®nica de Madrid sali¨® a escena como tal fue en la temporada 1999-2000. Cantaron Otelo y las cr¨ªticas fueron como se esperaba Merry: 'Est¨¢n muy verdes', sentenciaban los popes. Hoy es el d¨ªa que ya han pasado por Wagner, por muchos verdis, por el barroco espa?ol, por misas, r¨¦-quiems, conciertos... Nadie les pone una pega. Poco a poco se van adue?ando del repertorio y asumiendo retos, pero siempre con una prioridad: la ¨®pera. 'Es muy distinto formar un coro para dar conciertos que un coro de ¨®pera. Yo estoy aqu¨ª para hacer un coro de ¨®pera. Hay que diferenciar. Los coros de ¨®pera deben tener sus particularidades', asegura abrig¨¢ndose a gusto con la chaqueta beis que le hace m¨¢s alto aun que sus botas de cuero negras.
?Por ejemplo? 'Es muy importante el tama?o de la voz, tiene que ser muy amplio, muy flexible y sus miembros deben tener inter¨¦s en la interpretaci¨®n', cuenta este personaje forjado en la tradici¨®n de un pa¨ªs con coros de aficionados que trabajan al m¨¢ximo nivel y que ha dirigido, entre otros, al London Symphony Chorus o al Philarmonia Chorus. 'Cuando hicimos las pruebas de admisi¨®n, les obligu¨¦ a interpretar dos arias de ¨®pera con todo el sentimiento que fueran capaces de dar'. As¨ª fue eligiendo a los 70 miembros fijos que hoy componen este pulm¨®n imparable que llena el Teatro Real. A veces hay que aumentar el n¨²mero. 'Para hacer Parsifal tuvimos que meter 90 voces, lo mismo necesitaremos para hacer El sue?o de Gerontius, de Elgar, y para Don Carlo -la ¨²ltima ¨®pera de Verdi que han representado- hacen falta 80 cantantes', dice Merry.
Pero el hecho de que se vayan especializando en ¨®pera no significa que no puedan con todo. 'Mi coro puede hacer conciertos, aunque hay cosas que no vamos a cantar nunca', avisa. El list¨®n que se han puesto todav¨ªa no se divisa. 'Deber¨ªamos aspirar a hacer un gran repertorio que nos permitiera cantar ¨®peras diferentes cada d¨ªa, como ocurre en Viena, por ejemplo, donde se pueden programar hasta tres ¨®peras en el mismo teatro en una semana'. Aspiran a eso, a poder con todo, aunque el plan actual de programaci¨®n del Real le gusta, porque, 'al poder detenernos en una o dos ¨®peras cada mes nos deja profundizar'.
Para conseguir el objetivo, al grupo no le faltan energ¨ªas. El secreto es la juventud. 'La media de edad es de 35 a?os, no creo que haya en el mundo un coro tan joven. Es el problema de muchos teatros, tienen gente en sus formaciones que no deber¨ªa cantar', asegura poni¨¦ndose el traje de director de recursos humanos. Pero dulcifica el uniforme cuando habla de las necesidades de voces y de su dificultad para encontrar bajos y contraltos en Espa?a. 'No salen muchos de ese tono aqu¨ª. Las razones son f¨ªsicas, claramente'. Por eso ha tenido que echar mano de algunos rusos, b¨²lgaros, ingleses y estadounidenses que viven en Madrid.
'Lo que s¨ª hay son magn¨ªficas sopranos y tenores buen¨ªsimos, algo que en Inglaterra es muy dif¨ªcil de encontrar. Adem¨¢s aqu¨ª casi todos los de esa cuerda son iguales, bajitos y morenos', dice para no perder el sentido del humor, algo que le sobra. No en vano, fue compa?ero de colegio de Michael Palin, el ex componente de los geniales Monty Phyton. 'Cuando trabajamos el ambiente debe ser serio, tengo una responsabilidad enorme, pero al mismo tiempo hay que saber utilizar el sentido del humor para relajar. Despu¨¦s de una bronca, a los cinco minutos necesito hacer bromas para seguir. El mundo de la ¨®pera es muy intenso'.
Adem¨¢s, Merry es muy guerrero a la hora de reivindicar la importancia de los coros: 'Son cruciales. La gente acude a los teatros de ¨®pera primero por la obra, despu¨¦s por los cantantes. Nadie menciona a los coros. Pero cuando est¨¢n dentro, aunque todo vaya bien, si las partes del coro son malas, todo se hunde', dice. Es, de hecho, como una salsa sin pan.
Babelia
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.