El juicio m¨¢s largo de la historia

El 15 de noviembre de 1994 el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 11 de M¨¢laga recibi¨® en turno una querella interpuesta por la UGT por irregularidades en la privatizaci¨®n de Intelhorce en 1989 y la gesti¨®n de sus nuevos propietarios hasta 1992. En la instrucci¨®n se uni¨® la querella que Patrimonio del Estado present¨® cuatro meses antes contra Giovanni Orefici, y otras presentadas por Jos¨¦ Mar¨ªa Ruiz Mateos y por el ex diputado auton¨®mico del PP Jos¨¦ Egea, quien acusaba a altos cargos de la administraci¨®n socialista de prevaricar y malversar fondos del Estado en la adjudicaci¨®n de la f¨¢brica. Esta acusaci¨®n lleg¨® a considerar el asunto un nuevo caso Filesa. Ex ministros como Carlos Solchaga y Pedro Solbes fueron algunos de los 600 testigos que comparecieron ante el juez, que imput¨® a 44 personas, en una instrucci¨®n llena de sobresaltos. El magistrado Ram¨ªrez Barroso concluy¨® en el sumario que la venta de Intelhorce se urdi¨® entre Patrimonio del Estado y Giovanni Orefici y el abogado Jos¨¦ Manuel Mu?iz, que ¨¦stos recibieron la empresa saneada, con una ampliaci¨®n de capital de 5.869 millones, y que nunca tuvieron otro prop¨®sito que dilapidarlos y descapitalizar la sociedad desviando dinero a trav¨¦s de una serie de operaciones ficticias con otras sociedades y con una trama de facturas falsas.

El sumario lleg¨® a acumular casi 30.000 folios, el m¨¢s voluminoso instruido jam¨¢s en M¨¢laga, y cuando se dict¨® apertura de juicio oral en mayo de 1997, se mantuvo abierta una pieza separada archivada a?o y medio despu¨¦s en acerca del posible pago de comisiones al PSOE y el uso de ¨¦stas para la compra de El Correo de Andaluc¨ªa.

El juicio se inici¨® en octubre de 1998 con 39 acusados en el banquillo y concluy¨® hace dos meses, por lo que ha sido tambi¨¦n el m¨¢s largo celebrado en M¨¢laga.

En su discurrir ya se aventur¨® que el caso se desinflaba poco a poco. CC OO, una de las partes personadas, retir¨® sus acusaciones contra los altos cargos, y fue presentada fuera de plazo la que ejerc¨ªa Egea. As¨ª, ya s¨®lo se juzgaban las irregularidades en la gesti¨®n privada, y no si la privatizaci¨®n fue correcta.

La causa contra uno de los principales acusados, Jos¨¦ Manuel Mu?iz, fue sobreseida por una enfermedad irreversible. La vista fue suspendida por las vacaciones de verano de 1999. Pero al reanudarse, se jubil¨® uno de los magistrados del tribunal, lo que oblig¨® a repetir el juicio desde el principio desde enero de 2000. El nuevo C¨®digo Penal y la prescripci¨®n de algunos delitos dej¨® s¨®lo 16 acusados en el banquillo.