Tiene gracia

Tiene gracia ver el mundo de la alta tecnolog¨ªa telecomunicativa en que vivimos. At¨®nito observ¨¦ c¨®mo en las m¨¢quinas expendedoras de refrescos de la universidad se puede comprar una lata con ayuda del m¨®vil. Aunque, claro, desde que sabemos que ese aparato se conecta a Internet, nos vende entradas de cine o nos puede prevenir del mal tiempo, ya no nos sorprende ni siquiera el hecho de que funcione sin cable y menos de que transmita datos v¨ªa sat¨¦lite.

Dec¨ªa al principio que tiene gracia, porque no dejo de preguntarme por qu¨¦ en este mundo de la tecnolog¨ªa del sat¨¦lite, del m¨®vil, de Internet, los coches a¨²n funcionen con gasolina, el tabaco del planeta Tierra.

?Por qu¨¦ la tecnolog¨ªa avanza tanto para las telecomunicaciones y tan poco para el desarrollo, por ejemplo, de un coche con energ¨ªa solar? Muy sencillo. Porque, al igual que en el caso de las telecomunicaciones, el dinero est¨¢ en su avance tecnol¨®gico, mientras que en el sector automovil¨ªstico el dinero est¨¢ en el 'no avance'; s¨®lo hay que mirar que el petr¨®leo es el dinero del mundo. Este 'no avance' se extiende luego a otros componentes del coche. Sirva como ejemplo que en la Facultad de Qu¨ªmicas de Barcelona hace tiempo que han inventado una bater¨ªa de coche del tama?o de un mechero y que no hay que reemplazarla; es decir, un coche, una bater¨ªa. Las empresas del sector est¨¢n interesadas en el proyecto, ?saben para qu¨¦? Para comprar la patente y guardarla en un caj¨®n, porque a ellos les va mejor esto: un coche, varias bater¨ªas.-