El 'Gran Hermano' franc¨¦s desata la pol¨¦mica por los contratos abusivos a sus participantes

En el contrato se establece que los once participantes y sus suplentes no mantendr¨¢n otra relaci¨®n con la prensa que la que les ofrece el servicio de relaciones p¨²blicas de la productora; que renuncian, en caso de da?o f¨ªsico, moral o material, a perseguir legalmente a ASP Productions SAS y que aceptan que el material grabado pueda ser explotado, bajo cualquier forma o soporte, inclu¨ªdas las informaciones sobre su pasado o vida privada.

Asimismo se comprometen a presentarse dos veces por semana, durante los seis meses siguientes al fin de la emisi¨®n, ante la c¨¢mara web para responder a las preguntas de los espectadores internautas. Adem¨¢s, no podr¨¢n firmar ning¨²n contrato durante los 18 meses siguientes a la emisi¨®n del programa sin obtener el visto bueno de la productora.

Seg¨²n Dany Cohen, abogado consultado por Le Monde, es 'un atentado a la dignidad humana', pues los concursantes han renunciado 'a toda libertad, a la de ir y venir, a la de expresi¨®n, a su derecho de imagen y a que sea respetada su vida privada'.

Cohen no cree que los participantes sean 'jugadores' sino 'coautores' de la emisi¨®n y que no es legal pagar a los 'coautores' con lo que puedan ganar en un juego, sino que deben reclamar 'una parte proporcional de los ingresos procedentes de la cesi¨®n o la explotaci¨®n de la obra'. Olivier de Tissot, profesor especializado en cuestiones de contratos y propiedad intelectual, coincide con Cohen: 'El contrato es nulo porque no prev¨¦ un l¨ªmite temporal en la explotaci¨®n de la imagen de los participantes ni tiene en cuenta que el derecho a la imagen es siempre revocable. Es, adem¨¢s, contrario a la libertad de trabajo y de la industria'.

Para De Tissot, en Loft Story lo han organizado todo 'de acuerdo con una concepci¨®n anglosajona de los derechos de la propiedad art¨ªstica', concepci¨®n no aplicable en Francia y de ah¨ª que 'los participantes tengan derecho a exigir una remuneraci¨®n que tenga en cuenta los ingresos generados por la publicidad, Internet, el cable... en vez de conformarse con los beneficios aleatorios de un juego'.

Loft Story se emite desde hace diez d¨ªas y en este tiempo M6, que andaba en cuarto lugar de audiencia, ha progresado de manera fulgurante, conquistando el 28,5% de cuota de pantalla.

Los participantes son clones de los ya vistos en otro pa¨ªses. Steevy es un camarero gay de 21 a?os; Loana, de 23, hace strip-tease; Christophe, es un estudiante de 24, la misma edad que Kenza, comercial magreb¨ª que simpatiza con Aziz, de 28 a?os e id¨¦ntico origen. La parisina Laure (24) es una fan¨¢tica de la moda. Philippe, es el t¨ªmido y el intelectual. Julie, mulata de 24, trabaja en un hotel, Jean-Edouard es el benjam¨ªn (20 a?os) y estudia comercio. Delphine (23) es una muchacha capaz de hacer cantar a los mudos. Fabrice (29) dice ser artista y David (25) ha sido el primer expulsado, porque ten¨ªa una peque?a experiencia como actor.