El Congreso de Brasil logra los votos necesarios para crear una comisi¨®n de investigaci¨®n
El asunto de la corrupci¨®n pol¨ªtica ha saltado a la calle en Brasil. Y la gente se alegra porque piensa que podr¨ªa tratarse de una catarsis largamente deseada en un pa¨ªs que se encamina hacia la modernizaci¨®n y el desarrollo econ¨®mico. De ah¨ª que el Congreso -que contra la voluntad del Gobierno ha conseguido reunir los votos suficientes, incluso dentro de los partidos gubernamentales, para crear una Comisi¨®n de Investigaci¨®n Parlamentaria (CIP) mixta en el Senado y en la C¨¢mara sobre la corrupci¨®n pol¨ªtica- quiera que el hecho sea celebrado con una fiesta entre la poblaci¨®n y conseguir que, de este modo, la opini¨®n p¨²blica apoye la inicitiva.
El Gobierno de Fernando Henrique Cardoso, precisamente para evitar la creaci¨®n de la CIP sobre la corrupci¨®n, hab¨ªa instituido hace s¨®lo unas semanas una especie de nuevo ministerio destinado a investigar la corrupci¨®n pol¨ªtica, a cuyo frente hab¨ªa colocado a una famosa abogada. Pero la oposici¨®n, tanto en el Senado como en la C¨¢mara, siguieron recogiendo firmas por su cuenta para la creaci¨®n de la comisi¨®n. Y lo acaba de conseguir con votos incluso de algunos diputados y senadores que militan en el PSDB (Partido Socialista Democr¨¢tico Brasile?o), que es la formaci¨®n pol¨ªtica del presidente Cardoso.
La oposici¨®n alega que el Gobierno tiene miedo a dicha comisi¨®n porque no sabe hasta d¨®nde puede llegar. Cardoso y su Ejecutivo siempre creyeron que la CIP es anticonstitucional y que, adem¨¢s, podr¨ªa acabar paralizando el Parlamento cuando falta poco m¨¢s de un a?o para las elecciones presidenciales y en un momento delicado de la econom¨ªa debido a la crisis de Argentina.
Batalla del Gobierno
La batalla va a ser dura y el Gobierno va a hacer todo lo posible para evitar que se cree la Comisi¨®n; intentar¨¢ que algunos de los senadores y diputados de los partidos que apoyan al Gobierno pero han estampado su firma de apoyo a la CIP acaben retir¨¢ndola. Mientras tanto, la oposici¨®n pretende involucrar en el asunto a la sociedad civil, movilizando incluso a las calles y sirvi¨¦ndose de entidades como el Colegio de Abogados de Brasil (OAB), de la Conferencia Nacional Episcopal (CNBB) y de una serie de organizaciones no gubernamentales (ONG).
Precisamente, a la estrategia de la oposici¨®n le lleg¨® ayer un gran regalo con la noticia, publicada por la prensa, de que el ministro de Inegraci¨®n Nacional, Fernando Bezerra, quiz¨¢s se vea obligado hoy mismo a dimitir de su cargo ante la sospecha de que pueda estar involucrado en el esc¨¢ndalo millonario del fraude de una de las instituciones (SUDENE) que administraban los Fondos para el desarrollo econ¨®mico de la Amazonia. El ministro, por quien el presidente Cardoso se ha declarado "traicionado" al no haberle comunicado antes de su nombramiento como ministro que pose¨ªa el 65% de la empresa Metais Serid¨®, S.A, en Rio Grande del Norte, para la producci¨®n de hierro, tendr¨¢ que explicar hoy por qu¨¦ su empresa, de las 400 toneladas de producci¨®n que hab¨ªa prometido, s¨®lo produjo en 12 a?os el 6%. Para dicha compa?¨ªa, ya hab¨ªa recibido de los fondos del Estado 3,6 millones de euros.
Y lo m¨¢s grave es que el ministro Bezerra era el responsable de la SUDENE, el organismo que desapareci¨® la semana pasada, al mismo tiempo que el coordinador de la SUDAM, la otra instituci¨®n encargada del desarrollo econ¨®mico de la Amazonia de la que se calcula que ha defraudado al Estado m¨¢s de 1.200 millones de euros.
A todo ello se a?ade que la Comisi¨®n de ?tica del Senado se prepara para pedir la expulsi¨®n de la c¨¢mara de los famosos senadores Antonio Carlos Magalh?es, poderoso ex presidente de dicha instituci¨®n, y de Jos¨¦ Roberto Arruda, ex l¨ªder del Gobierno en el Senado, acusados de haber quebrado para intereses personales el secreto del voto electr¨®nico el d¨ªa en que tambi¨¦n fue expulsado, hace ahora un a?o, el senador Luiz Estev?o. Los debates sobre el tema televisados en directo paralizaron la semana pasada durante horas ciudades enteras del pa¨ªs.
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