?Qui¨¦n manda aqu¨ª?
Seg¨²n los argentinos, el presidente De la R¨²a pierde poder frente a su ministro de Econom¨ªa
La crisis argentina ha transformado a los ojos de la opini¨®n p¨²blica las virtudes de Fernando de la R¨²a, por las que fue elegido presidente, en defectos imperdonables. Se sabe que el poder no cambia a nadie, simplemente le muestra como verdaderamente es. Ahora, en contraste con el impulsivo, ansioso, infatigable y pol¨¦mico ministro de Econom¨ªa, Domingo Cavallo, puede apreciarse que De la R¨²a est¨¢ por fin c¨®modo en su sitio, tratando de mediar en los conflictos, ajustado a su mejor perfil de hombre gris, prudente, de pocas fotograf¨ªas y palabras.
Pero el fracaso de la clase pol¨ªtica argentina en la gesti¨®n de la transici¨®n democr¨¢tica es de tal magnitud que ya nada se le perdona, ni siquiera que sea quien es. Las encuestas le castigan con los m¨¢s bajos ¨ªndices de popularidad y la cercan¨ªa de las elecciones parlamentarias promueven todo tipo de ataques contra ¨¦l, desde los que le critican con buen humor hasta los m¨¢s agraviantes.
"Tiene menos reacci¨®n que De la R¨²a", se dice en los campos de f¨²tbol cuando un portero se demora en salir a enfrentar un delantero que avanza con el bal¨®n dominado. Dennis Tito, el turista espacial, fue comparado con Chupe Tito, que "vive en la luna" y hace pagar a la sociedad los millones del viaje con el 21% del impuesto sobre el valor a?adido que Cavallo extendi¨® a todos los productos y servicios hasta ahora exentos, entre ellos los peri¨®dicos, la televisi¨®n de pago y las entradas al cine. Chupetees el apodo hist¨®rico de De la R¨²a.
Las encuestas m¨¢s serias revelan un descenso de 45 puntos en la imagen positiva del presidente desde que inici¨® su mandato hace dieciseis meses, en diciembre de 1999. Entonces superaba el 60% y ahora llega s¨®lo al 15%. La imagen de Cavallo se mantiene a pesar de los anuncios de medidas econ¨®micas que resultan cada vez m¨¢s duras para la mayor¨ªa. El 44% de los consultados tiene, a pesar de todo, una imagen positiva del ministro y casi la mitad de la poblaci¨®n conf¨ªa "bastante" y "mucho" en que sus planes podr¨¢n reactivar el mercado interno.
La demorada decisi¨®n de retirar de forma permanente al embajador argentino en Cuba, es una demostraci¨®n del estilo de De la R¨²a. En su intento de evitar que Argentina se sumara a los votos de condena a la pol¨ªtica de derechos humanos, Fidel Castro llam¨® al Gobierno desde "lamebotas de los yanquis" hasta "ratones y cucarachas". Y, a?adi¨®, que De la R¨²a "ya no preside nada". Quince d¨ªas pasaron hasta que la Canciller¨ªa respondi¨® con un comunicado en el que se hac¨ªa constar que "Argentina recibi¨® nuevos agravios desde el m¨¢s alto nivel del Gobierno de Cuba, que afectan a las autoridades elegidas democr¨¢ticamente por el pueblo argentino".
?Qui¨¦n manda aqu¨ª? "Muchos creen que gobierna Cavallo", titulaba el peri¨®dico La Naci¨®nuna cr¨®nica sobre los resultados que arrojaba una encuesta espec¨ªfica sobre el tema. La pregunta que la consultora hizo a 350 personas residentes en Buenos Aires, la capital del pa¨ªs, era: "?Qui¨¦n cree que gobierna realmente?" El 42,86% no tuvo dudas: Cavallo. S¨®lo el 7,43% nombr¨® en primer lugar a De la R¨²a. El 23,14% consider¨® que "ambos" deciden juntos y el 22% supone que el poder real se ejerce fuera del Gobierno. Ricardo Ostuni, el portavoz del presidente, descalific¨® el sondeo: "La encuesta se hizo con una pregunta capciosa que tiene respuesta inducida".
En declaraciones a EL PA?S, el portavoz atribuy¨® la publicaci¨®n de este tipo de encuestas y las cr¨ªticas al jefe del Estado al "clima electoral". "Aqu¨ª gobierna el doctor Fernando de la R¨²a y todo lo que se diga en contrario no tiene ning¨²n sentido. Es consecuencia del clima electoral, de las peleas internas de los partidos previas a las parlamentarias de octubre. Cavallo tiene un mayor protagonismo y ocupa la primera plana de los diarios porque est¨¢ renegociando la deuda externa, pero sigue directivas impartidas por el presidente. Como sucedi¨® tambi¨¦n cuando se vot¨® sobre los derechos humanos en Cuba.
El protagonismo fue del canciller, pero segu¨ªa instrucciones del presidente. En cuanto a la reacci¨®n de Castro, hemos decidido contestar con hechos, retirando definitivamente al embajador. Que siga vociferando. Dios quiera que el pueblo cubano tenga alg¨²n d¨ªa el derecho de votar, de elegir entre varios candidatos, de leer diarios opositores, el voto argentino fue en ese sentido, de apoyo al pueblo cubano. ?Ojal¨¢!, alg¨²n d¨ªa, los periodistas que trabajan all¨ª puedan llamar a la oficina de Castro, como hace usted ahora, y sean atendidos inmediatamente".
Pero no se trata s¨®lo de encuestas. El ex vicepresidente Carlos Chacho?lvarez, que renunci¨® al cargo el pasado mes de octubre y acaba de abandonar la jefatura del Frepaso, el frente de partidos de centroizquierda que integra, junto con la Uni¨®n C¨ªvica Radical, de la que procede De la R¨²a, la Alianza en el poder, parece sentirse al fin definitivamente libre de ataduras para decir aquello que pensaba y callaba: "El presidente Fernando de la R¨²a no tiene la voluntad para salir de la Argentina menemista". Y fue luego al punto en cuesti¨®n: "El presidente corre un riesgo pol¨ªtico muy grande porque su figura es cada vez m¨¢s opacada y diluida por Cavallo".
El ex vicepresidente y ahora tambi¨¦n ex l¨ªder del Frepaso, que se dedicar¨¢ a la construcci¨®n de un nuevo "movimiento social", dijo que el presidente debi¨® "poner l¨ªmites" a Cavallo cuando el ministro sugiri¨® que las denuncias contra el ex presidente Carlos Menem en la investigaci¨®n de la venta de armas a Panam¨¢ y Venezuela, desviadas finalmente a Ecuador y Croacia, deb¨ªan ser investigadas por la Corte Suprema. Seg¨²n ?lvarez, la Corte es manifiestamente "menemista" y Cavallo no puede reclamar la constituci¨®n de fueros especiales en un caso donde est¨¢ involucrado -tambi¨¦n firm¨® junto con Menem y otros ministros de la ¨¦poca los decretos secretos que autorizaron las ventas-, s¨®lo para evitar que el esc¨¢ndalo pol¨ªtico afecte a la recuperaci¨®n econ¨®mica.
?lvarez acusa directamente a De la R¨²a de haber provocado su renuncia a la vicepresidencia: "En aqu¨¦l momento no tuve ni siquiera el apoyo del Gobierno ni del presidente, que tampoco mostr¨® hasta ahora voluntad por ese cambio que hab¨ªa votado la gente. Un cambio econ¨®mico y social y un cambio cultural en la Argentina de reglas menemistas". El portavoz de De la R¨²a dice que no habr¨¢ respuestas directas tampoco en este caso: "De ?lvarez no vamos a hablar ni a responder, el presidente le ha contestado ya con su silencio".
Los soci¨®logos y analistas expertos coinciden en que hay una "profec¨ªa autocumplida" en la percepci¨®n de la realidad. "El fantasma que hoy acosa a la sociedad es que un d¨ªa nos vamos a levantar de la cama con una devaluaci¨®n de la moneda y un estallido social", dice Heriberto Muraro. "A la falta de visi¨®n y de sentido de misi¨®n de los dirigentes, el resto de la sociedad responde con un creciente escepticismo. Se esta produciendo una profec¨ªa autocumplida. Nos repetimos: no hay soluci¨®n y, efectivamente, terminamos confirmando ese supuesto", agrega Manuel Mora y Araujo.
Cada d¨ªa, la clase pol¨ªtica argentina recibe desde todos los sectores y por todos los medios una raci¨®n de latigazos implacables, inclusive de aquellos que deber¨ªan ser castigados tambi¨¦n por su propia responsabilidad. Y por primera vez han comenzado a confundirse los gritos de queja y dolor que llegaban desde abajo con los que ahora se escuchan arriba, en la cima del poder.
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