El arbitrismo como forma de gobernar

PARA MODERNIZAR UNA ECONOM?A es m¨¢s importante crear el marco regulatorio adecuado que liberalizarla r¨¢pidamente. ?sta es una de las lecciones que ha sacado de su experiencia el que fue economista jefe y vicepresidente del Banco Mundial, Joseph Stiglitz (v¨¦ase EL PA?S del pasado mi¨¦rcoles). Viene a cuento esta referencia por los problemas que est¨¢ teniendo el Gobierno espa?ol para aplicar una pol¨ªtica de la competencia razonable e independiente y para establecer una regulaci¨®n estable y no arbitrista, como tan a menudo sucede.

La ¨²ltima injerencia (last but not least) ha sido el veto del Ministerio de Econom¨ªa a la compra de Hidrocant¨¢brico por parte de dos empresas con capital p¨²blico for¨¢neo. A finales del mes pasado, la Comisi¨®n Europea criticaba el intervencionismo que ejerce el Ejecutivo espa?ol en la aplicaci¨®n de la pol¨ªtica de la competencia, y advert¨ªa que 'la estructura institucional a la hora de aplicar la pol¨ªtica de la competencia sigue otorgando un importante papel al Gobierno'. La Comisi¨®n coincid¨ªa en esta ocasi¨®n con Stiglitz al afirmar que esta ausencia de reguladores fuertes e independientes es una de las causas de que el grado de apertura de la econom¨ªa espa?ola sea inferior al de otros pa¨ªses de su entorno.

La cr¨ªtica le llega ahora al Gobierno de parte del empresariado. La CEOE acaba de sacar un documento titulado Seguridad jur¨ªdica, inversiones y actividad empresarial, en el que profundiza en la ausencia de una regulaci¨®n estable en Espa?a, lo que genera inseguridad jur¨ªdica al empresario y desestabiliza su actividad. Hasta los liberales m¨¢s recalcitrantes insisten en que sin instituciones s¨®lidas e independientes del poder ejecutivo no hay econom¨ªa de mercado s¨®lida ni Estado de derecho consecuente. En una primera versi¨®n del documento de la CEOE, publicada en Expansi¨®n (21 de abril pasado), se afirmaba que 'los abruptos y sorprendentes cambios normativos' producen en el empresario nacional y extranjero 'inseguridad jur¨ªdica, angustia ante el Derecho y conciencia de poder ser sancionado por algo que ni ¨¦l ni sus asesores saben qu¨¦ es'; que 'la falta de certeza (en la estabilidad normativa) puede convertir, en ocasiones, los derechos de los ciudadanos y de los agentes econ¨®micos en mero formalismo sin contenido real'. El documento protesta por la habitual pr¨¢ctica del Gobierno de utilizar los decretos leyes y la ley anual de acompa?amiento de los presupuestos 'para producir un aluvi¨®n de normas, sin tener en cuenta las normas preexistentes'.

El texto aportado por la CEOE a EL PA?S no es id¨¦ntico al del peri¨®dico econ¨®mico, sino m¨¢s gen¨¦rico y menos brusco en sus cr¨ªticas al Gobierno, como si el inicial hubiese pasado una criba. En ¨¦l se define la seguridad jur¨ªdica como una suma de valores, como son los de seguridad personal, certeza normativa, no retroactividad injustificada, interdicci¨®n de la arbitrariedad, respeto al principio de confianza leg¨ªtima y tutela efectiva de los derechos. Sin referirse en concreto al Gobierno de Aznar, se dice que, demasiado a menudo, nuestra sociedad se caracteriza por un incremento notable y creciente de sus normas jur¨ªdicas, pudiendo llegar a un punto tal que la incertidumbre sea la regla, y la seguridad jur¨ªdica, la excepci¨®n. Se necesitan regulaciones jur¨ªdicas de la mayor estabilidad y regulaciones econ¨®micas conocidas, transparentes y con vocaci¨®n de permanencia.

Las llamadas de atenci¨®n de la Comisi¨®n Europea y de la patronal al Gobierno no son sospechosas de pertenecer al terreno de la confrontaci¨®n pol¨ªtica. Por eso son tan significativas. L¨¢stima que la CEOE se haya enterado tan tarde de este intervencionismo arbitrista y permaneciera en silencio, por ejemplo, cuando, a trav¨¦s de la guerra digital, el Gobierno quiso acabar con un grupo de comunicaci¨®n por no ser de su agrado.