El tribunal encarcela a un acusado del 'caso Raval' por la fuerte pena que prev¨¦ imponer

Lli qued¨® en libertad provisional en junio de 1999 y desde entonces ten¨ªa la obligaci¨®n de comparecer cada semana ante la secretar¨ªa de la Secci¨®n D¨¦cima de la Audiencia de Barcelona para firmar y demostrar que no hab¨ªa huido. El acusado no hab¨ªa faltado nunca a esa cita. Ayer tampoco, pero cuando lleg¨® a las dependencias judiciales le esperaban dos polic¨ªas de paisano para cumplir la orden de detenci¨®n e ingreso en prisi¨®n que hab¨ªa dictado el tribunal el pasado viernes.

La detenci¨®n de Lli, por tanto, podr¨ªa haberse realizado durante el fin de semana, pero la polic¨ªa no lo encontr¨® en su domicilio y preferi¨® esperar a que acudiese ayer a las dependencias judiciales, seg¨²n explicaron fuentes relacionadas con el caso. Tras permanecer un cuarto de hora esposado en un banco en el Palacio de Justicia, las funcionarias judiciales comunicaron a Lli la decisi¨®n del tribunal, basada en las 'elevadas penas' que se le podr¨ªa imponer por este caso y para evitar su huida.

Jordi Crespo, abogado de Lli, acudi¨® a la Audiencia de Barcelona para interesarse por su cliente y acab¨® entrevist¨¢ndose con la magistrada Montserrat Comas, de la Secci¨®n D¨¦cima, quien le explic¨® que el deseo del tribunal era que la detenci¨®n de Lli no trascendiera a los medios de comunicaci¨®n, como as¨ª ocurri¨®, hasta que se hubiera producido.

A la salida, Crespo censur¨® el encarcelamiento de Lli, al considerarlo desporporcionado. La defensa record¨® que su cliente hab¨ªa acudido todas la semanas a la Audiencia, que ten¨ªa un domicilio conocido y que no hab¨ªa reincidido en los supuestos abusos sexuales a los menores. Poco despu¨¦s de las dos de la tarde, Lli abandon¨® la Audiencia de Barcelona protegido por tres guardias civiles y dos polic¨ªas, quienes la emprendieron a codazos con los fot¨®grafos de prensa para evitar que realizasen su trabajo, en un comportamiento ins¨®lito en estos casos.

Petici¨®n de la fiscal¨ªa

La orden de encarcelamiento de Jaume Lli hab¨ªa sido solicitada por la fiscal del caso, Neus Pujal, el pasado 31 de enero, cuando ley¨® su informe final y ratific¨® la petici¨®n de 25 a?os de prisi¨®n para ¨¦l por diversos delitos de abusos sexuales y utilizaci¨®n de menores con fines pornogr¨¢ficos. El principal acusado en el proceso, el monitor Xavier Tamarit, para quien la fiscal pidi¨® en el juicio penas que suman 77 a?os, tambi¨¦n qued¨® en libertad provisional como Lli en junio de 1999. Sin embargo, en noviembre de 2000 fue detenido de nuevo acusado de abusar de otros dos menores de la localidad barcelonesa de Canet de Mar y desde entonces est¨¢ en prisi¨®n.

Fuentes judiciales explicaron ayer que el encarcelamiento de Tamarit, realizado en las v¨ªsperas de la sentencia, hace pensar que las penas que impondr¨¢ el tribunal ser¨¢n muy pr¨®ximas a las que solicitaba el fiscal para los dos principales acusados. Junto a ellos fueron juzgadas otras tres personas: los padres de un menor al que supuestamente alquilaban por peque?as cantidades de dinero y Josefa Guijarro, la madre de cuatro hijos que presuntamente sufrieron los abusos. Para cada uno de los primeros el fiscal pide 10 a?os c¨¢rcel y para Guijarro, penas que suman 15 a?os.

Por otra parte, la polic¨ªa de Barcelona detuvo el pasado viernes al masajista de un equipo de f¨²tbol infantil de esta ciudad acusado de abusos sexuales. Jordi F. C., de 37 a?os, se llevaba a los menores a su casa de uno en uno con la excusa de hacerles alg¨²n tratamiento especial. All¨ª les mostraba pel¨ªculas y revistas pornogr¨¢ficas y les hac¨ªa masajes que acababan en tocamientos. El acusado, que tiene antecedentes por hechos similares, qued¨® en libertad tras declarar en comisar¨ªa.