Aznar viaja hoy a Canad¨¢, ¨²nico pa¨ªs que ha aceptado la autodeterminaci¨®n de una provincia
El presidente del Gobierno, Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar, inicia hoy su primera visita a Canad¨¢, el ¨²nico pa¨ªs que ha permitido la autodeterminaci¨®n de una provincia, la de Quebec. Tras perder dos referendos, el ¨²ltimo por m¨ªnimo margen, en 1995, y cuando se pensaba que el movimiento independentista estaba pr¨®ximo a lograr su objetivo, el secesionismo ha entrado, en cambio, en una abierta crisis. El primer ministro federal, Jean Chr¨¦tien, puede, pues, ver con confianza un problema al que su hu¨¦sped espa?ol es especialmente sensible, pero que no ser¨¢ el tema b¨¢sico de unas conversaciones centradas en impulsar las relaciones bilaterales.
El nacionalismo quebequ¨¦s mantiene estrechas relaciones con el presidente de Catalu?a, Jordi Pujol, que visit¨® Quebec en 1996, aunque CiU no se orienta tanto al refer¨¦ndum de autodeterminaci¨®n como hacia la reforma del Estatuto. Y se diferencia del nacionalismo vasco por el dato fundamental de que nunca ha generado manifestaciones de violencia ni terrorismo. Pese a las tensiones propias de un contencioso de este tipo, ha habido siempre un di¨¢logo fluido entre las autoridades independentistas de Quebec y el Gobierno federal de Ottawa, dominado tambi¨¦n, tradicionalmente, por pol¨ªticos procedentes de ese 25% aproximado de franc¨®fonos.
Jean Chr¨¦tien presidir¨¢ el G-7 precisamente en 2002, cuando Aznar ser¨¢ presidente de turno de la Uni¨®n Europea y asistir¨¢, por tanto, a la cumbre canadiense. Es seguro que los programas de esos respectivos mandatos ser¨¢n otro tema de las conversaciones entre los dos l¨ªderes. En el plano internacional, Canad¨¢ desea, adem¨¢s, reforzar sus relaciones con la UE sin menoscabo de las que le ligan estrechamente a Estados Unidos, a pesar de que Chr¨¦tien comparte con Aznar un protagonismo en la oposici¨®n a la ley Helms-Burton y una pol¨ªtica de apertura econ¨®mica a Cuba que no evita dureza en las relaciones con Fidel Castro.
Pero el grueso de la breve visita de Aznar a la angl¨®fona Ottawa estar¨¢ dedicado a impulsar unas relaciones econ¨®micas modestas y m¨¢s claras desde que el acuerdo de pesca UE-Canad¨¢ de 1995 zanj¨® la llamada guerra del flet¨¢n. En los ¨²ltimos a?os, las relaciones econ¨®micas entre Espa?a y Canad¨¢ han dado un salto con la construcci¨®n por Ferrovial de una autopista de circunvalaci¨®n en Toronto, con una inversi¨®n de unos 400.000 millones de pesetas que es la mayor de una empresa espa?ola en la zona, y con otros proyectos de grandes empresas como Cepsa, Dragados, Iberdrola o Zara. Por su parte, la industria canadiense ha incrementado tambi¨¦n su presencia en Espa?a a trav¨¦s de Bombardier, que colaborar¨¢ con Talgo en el AVE Madrid-Barcelona; de Alcan, que ha reforzado su presencia en el sector del aluminio; o de Nortel Networks, activa desde 1990 en la telecomunicaciones.
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