El Gobierno y el Ayuntamiento de Barcelona imponen restricciones a las antenas de telefon¨ªa

El decreto de Medio Ambiente tiene car¨¢cter retroactivo y establece un plazo de seis meses para que los due?os de antenas que no cumplan los l¨ªmites de referencia ni las distancias exigidas regularicen su situaci¨®n. En su elaboraci¨®n han participado los ayuntamientos adscritos al consorcio Localret.

Sobre la base de las recomendaciones comunitarias se consideran los niveles de referencia m¨¢ximos permitidos para la exposici¨®n de las personas a los campos electromagn¨¦ticos. Menos expl¨ªcito resulta el texto al se?alar las distancias que deben mediar entre una antena y una vivienda ya que habla de zonas abiertas de uso continuado, como por ejemplo de terrazas, y se?ala 10 metros como la distancia m¨ªnima a respetar si se trata de potencias entre 100 y 1.000 vatios, 15 metros cuando la potencia sea de entre 1.001 y 2.500 vatios y 20 metros hasta 5.000 vatios. El decreto prev¨¦ extremar la protecci¨®n de determinados equipamientos, como las escuelas, donde las distancias de seguridad habituales se multiplicar¨¢n por cuatro.

La nueva normativa no prev¨¦ sanciones espec¨ªficas para los casos de incumplimiento. Seg¨²n Felip Puig, se aplicar¨¢n las mismas que establece la ley de intervenci¨®n ambiental. El consejero indic¨® que entre el 10% y el 15% de las antenas instaladas tendr¨¢n que ser revisadas para adecuarlas a la nueva regulaci¨®n.

La asociaci¨®n GEA, una de las m¨¢s combativas en favor de los derechos de los ciudadanos frente a las instalaciones de telefon¨ªa m¨®vil, considera, en una primera lectura, que el decreto es 'confuso y dif¨ªcil de aplicar teniendo en cuenta que las antenas m¨¢s corrientes tienen una potencia de 200 vatios mientras que las que se presentan como m¨¢s reguladas superan ampliamente esa cifra', seg¨²n la vicepresidenta, la letrada Teresa Huidobro. Mucho m¨¢s severa es la restricci¨®n que quiere imponer el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Barcelona, que llevar¨¢ a la sesi¨®n plenaria del pr¨®ximo viernes una moci¨®n que s¨®lo permitir¨¢ la colocaci¨®n de antenas de telefon¨ªa m¨®vil en edificios industriales, de oficinas o establecimientos del sector terciario, y en cualquier caso, situadas a m¨¢s de 100 metros de distancia del inmueble habitado m¨¢s pr¨®ximo.

El Ayuntamiento no es partidario de paralizar la instalaci¨®n de estos repetidores como le piden las plataformas de vecinos de 22 barrios barceloneses intranquilos con la repercusi¨®n que su proximidad est¨¢ teniendo para la salud de sus familias.

El concejal Ernest Maragall asegur¨® ayer que la moratoria que solicitan los vecinos no eliminar¨ªa los repetidores m¨¢s antiguos y dificultar¨ªa a¨²n m¨¢s la aparici¨®n de nuevas operadoras. Para que no haya dudas respecto a las prioridades municipales Maragall dijo: 'La salud y la seguridad de los barceloneses son lo primero. Las necesidades del mercado son secundarias'.