La Audiencia de Sevilla ve indicios de homicidio en el 'caso Bazar Espa?a' y reabre la v¨ªa penal
Un auto revoca la decisi¨®n del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 8, que s¨®lo vio una falta
El 31 de diciembre de 1998 se derrumb¨® en Sevilla un muro del antiguo Bazar Espa?a (el ¨²nico que quedaba en pie tras la demolici¨®n del resto del edificio siete meses antes) sobre la avenida Miraflores. El derrumbe provoc¨® la muerte de cinco personas que esperaban en la parada del autob¨²s.
Los siete imputados son el arquitecto Luis Recuenco y dos arquitectos t¨¦cnicos, Antonio Camarero y Dionisio Garc¨ªa, que dirigieron la demolici¨®n de toda la manzana, de la que s¨®lo dejaron en pie el muro que se derrumb¨®; y cuatro t¨¦cnicos de la Gerencia de Urbanismo, organismo responsable de la licencia de obra para la demolici¨®n y del control de la misma: el jefe de Licencias y Disciplina de la Gerencia, Juan Garc¨ªa Gil; los t¨¦cnicos de dicho departamento Juan Maudit Mor¨®n y Francisco L¨®pez Larra?aga, que emitieron el informe favorable a la concesi¨®n de la licencia de demolici¨®n; y el que fuera t¨¦cnico del departamento de Conservaci¨®n de la Gerencia, Jos¨¦ David Mu?oz de la Torre.
La secci¨®n s¨¦ptima de la Audiencia de Sevilla afirma en su auto que 'seg¨²n parece, ese muro se derrumb¨® debido al viento muy fuerte que soplaba', que alcanz¨® rachas de m¨¢s de 100 kil¨®metros por hora en el momento en que se produjo el sineistro.
M¨¢s de siete meses
'Sin embargo', contin¨²a el auto, 'fuera esa u otra la causa de que se desplomara sobre aquellas pesonas, lo decisivo es que ello ocurri¨®, seg¨²n lo investigado, porque desde hac¨ªa m¨¢s de siete meses ese muro hab¨ªa quedado como ¨²nico elemento de las edificaciones preexistentes en la manzana, sin arriostramiento ni apoyo alguno para prevenir y evitar su caida'.
En cuanto a las posibles responsabilidades por lo ocurrido, la Audiencia afirma que 'la adopci¨®n de medidas para reforzar y prevenir el derrumbamiento del muro una vez terminada la demolici¨®n de la manzana constitu¨ªa uno de los deberes elementales de previsi¨®n y cuidado cuya omisi¨®n caracteriza la imprudencia penal grave, dado el riesgo potencial de ca¨ªda del muro por la falta de aquellos apoyos. Apoyos y medidas de reforzamiento que, de haberse adoptado, hubieran quiz¨¢s evitado la tr¨¢gica muerte de cinco personas'.
La Audiencia deduce, de este razonamiento, que existen 'indicios racionales de la comisi¨®n de delito de homicidio por imprudencia grave', castigado por el vigente C¨®digo Penal con penas de entre uno y cuatro a?os de c¨¢rcel y ordena que se inicie la fase intermedia del procedimiento abreviado ya que 'existen datos suficientes para no prolongar la investigaci¨®n oficial, (...) sin perjuicio de las diligencias complementarias de instrucci¨®n que pudieran ser procedentes' lo que, en la pr¨¢ctica, supone reabrir la v¨ªa penal que, con la consideraci¨®n de los hechos como falta, quedaba agotada con la previsible condena a simples multas.
La decisi¨®n del Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 8, de febrero, de considerar los hechos como falta y no como delito estaban fundamentadas en que el juez Herrera no observ¨® 'la desatenci¨®n m¨¢s absoluta, la ausencia absoluta de cautela, o la desatenci¨®n m¨¢s grosera que exige la imprudencia grave'.
Ni en aquellos autos que redujeron a falta lo sucedido, ni en este ¨²ltimo de la audiencia que s¨ª ve indicios de delito, se hace en ning¨²n momento referencia a la empresa Inmobiliaria Osuna, que fue quien encarg¨® en 1998 la demolici¨®n de la manzana.
Ana Albarr¨¢n, madre de una de las v¨ªctimas del derrumbe y habitual portavoz de los familiares, mostr¨® ayer su 'm¨¢xima satisfacci¨®n' por la decisi¨®n judicial. 'Esto me permitir¨¢ recuperar la fe en la Justicia, que la ten¨ªa perdida por la instrucci¨®n que hab¨ªa tenido el caso. En dos a?os y medio, es la primera vez que me siento satisfecha', afirm¨® Albarr¨¢n que, en referencia a Rojas Marcos y otros dirigentes andalucistas, a?adi¨®: 'Ahora la satisfecha soy yo'.
'Nuestra lucha es s¨®lo por esclarecer los hechos. No queremos ni dinero ni indemnizaciones, lo hemos dicho siempre, s¨®lo la verdad. Es lo ¨²ltimo que puedo hacer por mi hija', coment¨® Albarr¨¢n, emocionada tras conocer el contenido del auto.
La madre de Ana Mar¨ªa Barroso Albarr¨¢n lament¨® la instrucci¨®n llevada a cabo por el Juzgado n¨²mero 8: 'Al juez Herrera le ven¨ªa grande el caso. Ahora la Audiencia reconoce los errores que cometi¨® en su trabajo'.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
?Tienes una suscripci¨®n de empresa? Accede aqu¨ª para contratar m¨¢s cuentas.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.