No dar a los ni?os finales a capricho
Un coloquio sobre literatura infantil revela que los ni?os prefieren tramas con sangre
'Si los dejamos, vamos a conseguir que salgan bandidos', contaba Concha L¨®pez Narv¨¢ez, sevillana con 42 t¨ªtulos a la espalda, que se sent¨® en una mesa redonda junto a Ana Rosetti, gaditana de San Fernando, poeta y creadora infantil, y la gallega Marilar Alexandre. Las tres se reunieron a prop¨®sito de la aparici¨®n de un n¨²mero especial sobre literatura infantil y juvenil que ha publicado la revista de la Instituci¨®n Libre de Ense?anza, en el que tambi¨¦n colaboran Fernando Savater, autor del pr¨®logo, Antonio Mu?oz Molina y Elvira Lindo, entre otros.
Las escritoras se mantuvieron firmes, como institutrices de luto, en no pasar ni una a los consumidores de un g¨¦nero que factura al a?o en Espa?a unos 40.000 millones de pesetas. 'Piden terror y finales sangrientos. Con lo que no se les puede dar todo lo que quieren', dec¨ªa L¨®pez Narv¨¢ez. 'Eso ser¨ªa maleducarles. No podemos escribir al dictado de los ni?os. Se pueden tener en cuenta algunas ideas y gustos, pero no todo', arg¨¹¨ªa Rosetti. 'Los ni?os son bastante convencionales, les chocan los finales abiertos y no les gustan las mujeres que se disfrazan de hombres para conseguir algo o las hero¨ªnas en las historias, prefieren chicos', contaba Alexandre.
Las tres hablaron tambi¨¦n de su inspiraci¨®n y dejaron claro que sin trabajo, ¨¦sta no vale de nada: 'Yo tengo cuatro tipos de inspiraci¨®n, la exterior, que viene de la observaci¨®n; la interior, que es el recuerdo; la de la voluntad propia y la ¨²ltima, que es lo que llamo el chucu chucu, la idea que aparece de repente', contaba la sevillana. Como buena gallega, Aleixandre, dijo que ella era esc¨¦ptica, que pod¨ªa haber un uno por ciento de inspiraci¨®n en sus obras, pero que el 99% restante, era trabajo.
No ha necesitado muchas musas Ana Botella para que se publicara ?rase una vez... La primera dama, muy en su papel de madre de Espa?a, firm¨® y pase¨® ayer por el recinto con una comitiva a la que carg¨® bien de bolsas. Ya es proverbial el amor por los libros de Botella, que el otro d¨ªa, en el programa de Ana Rosa Quintana, donde fue entrevistada, felicit¨® a la presentadora por el ¨¦xito de su libro. Ya saben, el del plagio. Pues, eso, que ayer, en la feria, la cosa fue de cuentos.
Babelia
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