Manolo Garc¨ªa y Pedro Guerra acaparan la semana con sus recitales
- Mujeres al frente. La presencia de las gallegas Ux¨ªa y Susana Seivane en Emociona!!!Celta, un programa mayoritariamente femenino, simboliza la importancia de las mujeres en la m¨²sica de hoy. En el grupo canario Mestisay, la diferencia la marca su cantante, Olga Cepeda, lo mismo que Wax Beat, con Patricia Krauss al frente. La actriz Natalia Dicenta ya demostr¨® hace un a?o en el Caf¨¦ Central que tambi¨¦n recrea estupendamente cl¨¢sicos del jazz, y ahora se atreve a repetirlo tres noches en el teatro Alb¨¦niz dentro del ciclo Madrid EnCanto. La cantautora aragonesa Mar¨ªa Jos¨¦ Hern¨¢ndez se pasa por el ciclo de La Vaguada.
Pero donde el m¨¦rito femenino se hace m¨¢s patente es con la presencia en Clamores de la Orquesta Femenina Andalus¨ª, una agrupaci¨®n musical fundada en Marruecos por el Maestro Chekkara, figura fundamental en la recuperaci¨®n de la m¨²sica del antiguo Al Andalus. Adem¨¢s, Mercedes Pe¨®n, F¨ªa Na Roca y La Bruja Gata act¨²an juntos para presentar en Madrid el Festival Celta de Ortigueira, a celebrar en verano en esa villa coru?esa.
- Hombres solos. Los ecos de Brasil suenan gracias a Leo Minax, un guitarrista, compositor y cantante que lleva tiempo viviendo en Madrid; y a Moreno Veloso, el hijo del gran Caetano Veloso. O¨ªr a su padre desde que le cantaba canciones de cuna ha marcado su vida y su estilo, pero Moreno intenta escapar de su sombra a?adiendo a su bossa la impronta de la electr¨®nica.
En Pedro Guerra, un m¨²sico esponja, hay tambi¨¦n mucho de Brasil, pero adem¨¢s, Caribe, trova cubana, canci¨®n francesa, ?frica y Europa. Ofrenda, su cuarto disco, es un brillante compendio de todas las m¨²sicas que le atraen y todos los temas que le preocupan: amor, integraci¨®n, exilio, mestizaje, tolerancia y buen rollo.
Nunca el tiempo es perdido es el segundo disco en solitario de Manolo Garc¨ªa tras disolver El ?ltimo de la Fila. Con sus ecos arabizantes y exquisitas y meditadas letras, ahora mismo es el disco m¨¢s vendido en Espa?a, lo que abunda en el ¨¦xito que supone llenar tres noches el Palacio de los Deportes (30.000 espectadores).
El gaditano Chano Dom¨ªnguez, acompa?ado de un cuarteto, dedica la semana entera a fundir jazz y flamenco, un asunto en el que se le considera un maestro innovador. El argentino afincado en Madrid Andy Chango presenta su segundo disco espa?ol, Las fant¨¢sticas aventuras del Capit¨¢n Angustia, donde, sin tanta alusi¨®n a las drogas como en su anterior trabajo, sigue abundando en su afici¨®n por la qu¨ªmica de farmacia y los achaques de salud. El cantaor Jos¨¦ Merc¨¦ abre en un magn¨ªfico escenario, el Auditorio del Torre¨®n, el programa Esc¨¦nica 2001 que organiza el Ayuntamiento de Pozuelo. ?pera, musical experimental y teatro son otras de las actividades, adem¨¢s de los conciertos, que pasar¨¢n despu¨¦s de Merc¨¦ por ese peculiar encuentro cultural.
- En grupo. La descarga contundente de la semana la ofrecen el metal pesado de Megadeth y el funky-rap-metal de Incubus, dos propuestas atronadoras. El punki suena argentino con Ataque 77 y vasco con Su Ta Gar. Los mods espa?oles siguen teniendo en Matamala un referente; Undrop, Super Skunk o Garaje Jack pintan de rock canciones de corte pop, y Digital 21 ense?a su rock electr¨®nico. El mestizaje festivo de la pachanga de la aldea global es servido por Color Humano.
El contrapunto a tanta energ¨ªa y juventud lo ponen los cubanos Septeto Santiaguero. El son y la clave siguen siendo sus armas para poner a la gente a bailar sin necesidad de otros derroches el¨¦ctricos.
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