'Quiero regresar a Marruecos'
'Hace unos meses todos ¨¦ramos clandestinos, est¨¢bamos muertos. Ahora somos ciudadanos que podemos vivir con dignidad'. Antes de enrolarse en la causa de los sin papeles encerrados, Lahcen el Bourkhissi durmi¨® durante dos meses y medio en la calle. Hab¨ªa dejado Marruecos embarc¨¢ndose en una patera 'tan llena que no cab¨ªa ni un alfiler', y cuando lleg¨® a Barcelona, su sue?o europeo se desvaneci¨®. 'Cre¨ªa que era diferente, s¨®lo encontr¨¦ problemas', aseguraba ayer. Lahcen ya tiene papeles y conf¨ªa en encontrar pronto un trabajo para reunir el dinero suficiente que le permita regresar con los suyos a Marruecos.
SAID AHMAD:'Todav¨ªa espero mi legalizaci¨®n'
Como su compatriota Abdul Waheed, el paquistan¨ª Said Ahmad tampoco estaba ayer en la lista de los afortunados a los que se entreg¨® el comunicado de su regularizaci¨®n. Estuvo tambi¨¦n en la iglesia del Pi desde el principio hasta el ¨²ltimo d¨ªa del encierro y estuvo en huelga de hambre durante 15 d¨ªas. Pero esto no ha bastado, y si su expediente no se resuelve positivamente en las pr¨®ximas semanas, Said deber¨¢ seguir viviendo en la clandestinidad, ya que no puede regresar a su pa¨ªs, del que huy¨® por 'motivos pol¨ªtivos'. Vive con otros paquistan¨ªes en Ciutat Vella y no pierde la esperanza de obtener finalmente los papeles.
ASSANE DJIBRIL: 'No tengo dinero, pero s¨ª papeles'
'En cuanto haya reunido el dinero suficiente, regresar¨¦ a mi pa¨ªs para ver a mis cuatro hijos y a mi mujer. Luego volver¨¦ a Barcelona para trabajar'. El senegal¨¦s Assane Djibril no los ve desde hace dos a?os, cuando embarc¨® en un pesquero que le llev¨® clandestinamente desde Dakar hasta Tenerife. Trabaj¨® all¨ª durante meses vendiendo gafas y collares en las playas, y cuando tuvo dinero para el avi¨®n, viaj¨® a Barcelona. Durmi¨® durante meses en la plaza de Catalunya, hasta que un amigo senegal¨¦s le ofreci¨® alojamiento en su casa. 'Ahora no tengo nada de dinero, pero s¨ª papeles para empezar una nueva vida', afirma.
ABDUL WAHEED: ?Por qu¨¦ a m¨ª no me dan papeles?
Abdul Waheed no aplaud¨ªa ayer en la iglesia del Pi, ni coreaba los c¨¢nticos, ni alzaba los dedos en se?al de victoria. Porque este paquistan¨ª de 30 a?os se ha quedado sin papeles pese a que estuvo los 47 d¨ªas del encierro en la iglesia del Pi e hizo una huelga de hambre que le llev¨® a las puertas de la muerte. 'No tengo ninguna causa judicial pendiente. ?Por qu¨¦ no tengo papeles?, ?por qu¨¦?', se preguntaba una y otra vez incr¨¦dulo, con sus negros ojos cubiertos de l¨¢grimas. El futuro de Abdul es ahora incierto, como lo era hace un a?o cuando lleg¨® a Barcelona. Unos compatriotas le ofrecen alojamiento y les paga con lo que pede reunir vendiendo gafas en la calle.
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