Barenboim afirma que negarse a interpretar a Wagner supondr¨ªa una victoria de Hitler

Este profeta de la m¨²sica, nacido en Buenos Aires hace 58 a?os, menudo, inconformista y guerrero, lleg¨® ayer al Teatro Real a las diez de la ma?ana. Se meti¨® en la sala principal cuatro horas y media, y se dej¨® llevar por el s¨®lido sonido que extrae de los 122 m¨²sicos de la Orquesta de la ?pera Estatal de Berl¨ªn, de la que es director art¨ªstico y musical. Su s¨¦quito lo componen esta vez 330 personas, entre t¨¦cnicos, m¨²sicos y cantantes, 26 solistas y 93 del coro. Sali¨® un rato, con traje negro y camisa blanca sin cuello, para atender preguntas de los periodistas, y luego se volvi¨® a meter en la m¨²sica de Wagner.

Barenboim vuelve a traer a Espa?a ese plumero que aplica al Wagner vilipendiado por la historia, y que ¨¦l deja como un sol. Ha dirigido ya todas las ¨®peras del compositor, a quien Barenboim, como jud¨ªo amante de tender puentes, lleva dignificando desde los a?os setenta. Se ha convertido en su mayor int¨¦rprete de referencia vivo y lo ha hecho paso a paso, como en una cruzada emprendida contra el embadurnamiento nazi que lleva el m¨²sico encima.

La prueba est¨¢ en la pol¨¦mica que ha causado en Israel, cuando Barenboim, ciudadano de ese pa¨ªs, ha querido interpretar La walkiria, ante el esc¨¢ndalo de muchos sectores jud¨ªos, que lo consideran una ofensa. El director y pianista se despach¨® ayer: 'Yo s¨¦ que Wagner produce dolor a mucha gente por su antisemitismo. Pero no quiero herir a nadie, de verdad. Quien no desee escucharlo no tiene por qu¨¦. Pero tampoco tienen derecho a impedir que quien quiera o¨ªrlo lo pueda hacer. Si se impide eso, ser¨ªa como una victoria m¨¢s de Hitler y los nazis', dijo. 'En Israel, el caso Wagner es muy complejo. Aunque ya Toscanini, un director antifascista, lo interpret¨® en 1936, no se pueden dejar de hacer asociaciones de ideas con los nazis por el uso y el abuso que estos hicieron del mismo. Entiendo a quienes hacen esos paralelismos, pero yo creo que es un principio democr¨¢tico dejar ejercer la libertad a quienes no tienen esos problemas'.

Todav¨ªa le causa asombro c¨®mo germin¨® y cuaj¨® el nazismo en Alemania, y m¨¢s desde que vive all¨ª largas temporadas: 'No entiendo c¨®mo se llev¨® a un pa¨ªs civilizado a la barbarie. Hitler era un gur¨² que llev¨® a Alemania al suicidio colectivo, como hoy esas sectas que se inmolan enteras', dice. Es la misma sensaci¨®n de pesadumbre que le produce la situaci¨®n en Oriente Pr¨®ximo: 'Es un conflicto que no tiene remedio. M¨¢s ahora. Cuando a la ignorancia de cada parte se une la desconfianza, entonces aparece el peligro', dice. 'El problema no se resuelve con argumentos hist¨®ricos. Los conflictos no los causa el aire, sino los seres humanos, y son ellos los que deben resolverlos'.

Ayer, el m¨²sico, quiz¨¢ por quitarse de encima el peso de la partitura wagneriana, habl¨® de todo menos de Los maestros cantores, ¨®pera de m¨¢s de cinco horas de duraci¨®n que se ofrece a partir de las siete de la tarde y no a las ocho, hora en la que generalmente dan comienzo los espect¨¢culos en el Real, ma?ana y los pr¨®ximos d¨ªas 26 y 30. Barenboim s¨ª accedi¨® a referirse a Argentina, pa¨ªs que le vio nacer y que hoy est¨¢ en bancarrota: 'Los argentinos no han tenido la suerte de superar el peronismo como se super¨® aqu¨ª el franquismo. La corrupci¨®n es impresionante. Ya saben lo que dicen all¨ª, que hay dos tipos de pol¨ªticos, los corruptos y los muy caros'.

La naturaleza humana

Y entre batacazos a mangantes y su defensa del arte frente a la barbarie, coment¨® tambi¨¦n la vigencia de Fidelio, de Beethoven, ¨²nica ¨®pera del compositor alem¨¢n, que trae su compa?¨ªa en cuatro funciones, los pr¨®ximos d¨ªas 27 y 29, y el 1 y 3 de julio. 'Habla de la libertad, la justicia, la opresi¨®n. Me parece que en el presente, con tantos progresos t¨¦cnicos, en una ¨¦poca que hemos pasado del caballo al Concorde, muchas veces olvidamos que todas esas cosas existen'.