Tesoros de sonido y armon¨ªa

Violero es el nombre que se da al constructor de violines. De todos los violeros, su gran maestro fue Antonio Stradivari. Vivi¨® entre 1644 y 1737. De su taller de Cremona surgi¨® en los primeros a?os del siglo XVIII el aut¨¦ntico canon de estos instrumentos musicales de arco, ideados para transmitir las emociones m¨¢s hondas. Desde ayer, y hasta el pr¨®ximo 30 de septiembre, una de las mejores piezas del violero cremonense se exhibe con otras 23 joyas musicales, pianos, flautas, salterios, incluso metr¨®nomos, en el Museo Cerralbo, en la calle de Ventura Rodr¨ªguez, edificado en 1893 en pleno barrio de Arg¨¹elles.

La exposici¨®n se denomina Instrumentos Musicales Hist¨®ricos. Testimonio del desarrollo de cien industrias y artesan¨ªas, es una apuesta de la Direcci¨®n General de Bellas Artes del Ministerio de Cultura. Muestra a expertos y legos que la aportaci¨®n instrumental de la m¨²sica espa?ola no se ci?e a panderetas, casta?uelas y guitarras, t¨®picos vigentes a¨²n entre eruditos de emporios musicales europeos, sino que incluye adem¨¢s tesoros hasta ahora desconocidos que hoy se ense?an dentro de los recorridos de un recinto muse¨ªstico de ambiente, centrado en el plet¨®rico, y ahora musical, siglo XIX. La exposici¨®n ha sido comisariada por Cristina Bordas, historiadora de la M¨²sica y profesora de la Universidad Complutense.

El malague?o Jos¨¦ Gallegos ide¨® la 'guitarpa', de 35 cuerdas, mezcla de chelo, arpa y guitarra

El stradivarius que se exhibe es peque?o: apenas 35,6 cent¨ªmetros mide su caja, de una anchura de 16,8 cent¨ªmetros y una longitud vibrante de 32,4 cent¨ªmetros. Posee cuatro clavijas y otras tantas cuerdas de tripa. Su barniz marr¨®n c¨¢lido es a¨²n hoy un enigma en su composici¨®n qu¨ªmica. De silueta mesurada y firme, a¨²na el secreto de proporciones y armon¨ªa que permite desde la hondura de su madera el fluir de un sonido ¨²nico, incomparable; tanto, que hay quien dice que sus medidas obedecen a la denominada regla a¨²rea, combinaci¨®n de dimensiones de cuya genial mixtura surgen las artes todas. El viol¨ªn fue construido por Stradivari en 1713 y tiene un nombre: Boissier. Con el tiempo, fue adquirido por el violinista navarro Pablo Sarasate, quien lo leg¨® al Conservatorio Superior de M¨²sica de Madrid, de donde ha sido tomado para su exhibici¨®n.

'Arpas, claves, bajones, clarinetes, chelos... han sido restaurados mimosamente para esta exposici¨®n', se?ala Cristina Bordas, 'pero no para su uso musical, que hoy resultar¨ªa casi imposible', precisa.

Las piezas proceden del Palacio Real, del Conservatorio de Madrid y de los Museos Arqueol¨®gico y Nacional de Antropolog¨ªa (verdadero albergue de objetos musicales que piden a voces la creaci¨®n de un Museo de la M¨²sica en Madrid). Tambi¨¦n hay ejemplares de coleccionistas privados.

Destaca una guitarpa, raro y ¨²nico instrumento fruto de la experimentaci¨®n de su ideador, el malague?o Jos¨¦ Gallegos. Premiado en la Exposici¨®n Universal de Londres, en 1851, a¨²na arpa, guitarra y chelo. De 35 cuerdas, 26 de ellas act¨²an sobre el arpa y reproducen las escalas diat¨®nica y crom¨¢tica. Fue dedicada por su constructor a la duquesa de Montpensier.

A su lado, luce su lomo solemne y algo descolorido de un violonchelo surgido en 1709 de las manos de Gabriel de Murcia, violero de la Casa de la Reina de Espa?a desde 1682. Procede del Museo de Antropolog¨ªa. No ha sido modernizado, aunque s¨ª soberbiamente restaurado, y conserva la rotundidad de un original excelso, con la longitud de su diapas¨®n se?aladamente m¨¢s corta que la de los instrumentos de hoy. Muy cerca, relucen dos pochettes, violincillos empleados por los maestros de danza; los trasladaban en el bolsillo, de ah¨ª su nombre en franc¨¦s.

Uno de ellos, de 38 cent¨ªmetros, tiene el dorso labrado con una iconograf¨ªa de escenas b¨ªblicas, referidas al bautismo como fuente de la vida. Su tabla arm¨®nica y su diapas¨®n son de carey; su clavijero y su cordal, de marfil y la caja, de madera frutal. Fue construido en el siglo XVII y mantiene su cantarina frescura.Destaca por su valor documental un arpa de dos ¨®rdenes de 1700, obra en nogal del toledano Juan L¨®pez. Fotografiada por Nicanor Zabaleta, pudo por ello ser recuperada en 1940 y ahora restaurada. Todos los instrumentos expuestos refulgen con raro esplendor.

Instrumentos Musicales Hist¨®ricos en las Colecciones Espa?olas. Museo Cerralbo (Ventura Rodr¨ªguez, 17). Horario: de 9.30 a 14.30 de martes a s¨¢bado y de 10.00 a 14.00 los domingos. La entrada cuesta 400 pesetas, excepto los domingos y mi¨¦rcoles, que es gratis.