Croacia descubre sus cr¨ªmenes de guerra
Tras a?os de ocultaci¨®n por parte del Gobierno, la sociedad croata conoce la brutal acci¨®n de sus tropas en 1995
Las circunstancias en torno al feroz asesinato de Nikola y Milica Damjanic, dos ancianos serbios muertos a balazos y quemados por soldados croatas el 11 de agosto de 1995 en uno de los pueblos liberados por el Ej¨¦rcito croata unos d¨ªas antes, como la historia personal del nieto de los muertos, activo todav¨ªa en las Fuerzas Armadas de Croacia, resumen toda la tragedia que el Tribunal de La Haya tiene que investigar cuando se dispone a activar las primeras acusaciones contra altos oficiales croatas.
La cuesti¨®n de los cr¨ªmenes de guerra cometidos contra la minor¨ªa serbia por las fuerzas croatas en las operaciones militares de recuperaci¨®n de la regi¨®n de la Krajina en 1995 sigue siendo un tema tab¨² en muchos medios, durante a?os estrictamente controlados por el r¨¦gimen del fallecido presidente Franjo Tudjman. Bloqueados por una fuerte autocensura alimentada todo un decenio por la propaganda nacionalista oficial y distribuida en particular por la televisi¨®n nacional, muchos croatas no aceptan los resultados de las investigaciones realizadas por un pu?ado de periodistas fieles a la ¨¦tica de su profesi¨®n y por varias organizaciones de derechos humanos. Los datos proporcionados han servido como punto de partida para las pesquisas hechas por el Tribunal Penal para los cr¨ªmenes en la antigua Yugoslavia (TPIY), el cual ha emitido ¨®rdenes de captura contra dos generales croatas, lo que ha dividido no s¨®lo al sector pol¨ªtico, sino a buena parte de la sociedad, dado que los grupos de derechas sostienen que la fiscal¨ªa del Tribunal de La Haya acusa a los croatas de haber cometido genocidio contra la minor¨ªa serbia.
Desafortunadamente, entre los 150.000 serbios que huyeron hacia Bosnia-Herzegovina y luego hacia Yugoslavia ante el avance de las fuerzas croatas, no se encontraban Nikola y Milica Damjanic, dos ancianos nacidos en 1919 y 1922.
Viv¨ªan en el pueblo Prokljan, sobre el lago hom¨®nimo, en el borde de la llamada Krajina, a tan s¨®lo 20 kil¨®metros de la costa d¨¢lmata y bajo la autoridad de los serbios sublevados en 1991. Los familiares que los vieron despu¨¦s de que el pueblo fuera reconquistado por los soldados croatas el 5 de agosto de 1995 recuerdan que estaban contentos porque despu¨¦s de a?os de incomunicaci¨®n se hab¨ªan enterado de que todos sus nietos, soldados croatas, estaban vivos.
El m¨¢s mimado de todos ellos, Nikica S., hoy tiene 40 a?os y grado de mayor, y sigue activo como profesor de t¨¢ctica de combate en una academia militar en Zagreb. Lo hab¨ªan bautizado con el nombre de su abuelo materno. Por parte de su padre, un croata, Nikica hab¨ªa recibido una educaci¨®n tolerante, lo cual le ayud¨® a no ceder a las emociones que despierta el lado oscuro de la guerra, cuando como defensor croata tambi¨¦n se encontr¨® en posici¨®n de decidir acerca de la vida o la muerte de prisioneros de guerra o civiles serbios.
'Yo sab¨ªa que si mataba a alguno de ellos hubiera sido igual o peor a los que nos atacaban y saqueaban nuestros pueblos, a los que incendiaron la casa en la que nac¨ª y a los que hab¨ªa que vencer porque mataron a miles de croatas y porque se levantaron en armas contra nuestra patria', dijo ayer a EL PA?S.
Pero muchos de los que peleaban al lado de Nikica decidieron mal. As¨ª lo hicieron los que el 11 de agosto de 1995 asesinaron salvajemente a Nikola y Milica, los abuelos maternos de este mayor. 'Primero los mataron a tiros de Kal¨¢shnikov, luego los quemaron tir¨¢ndolos sobre unas gomas de auto y redes de pescar que mi abuelo ten¨ªa en su patio', relata, recordando que en la filas croatas hab¨ªa incluso criminales sacados de las c¨¢rceles porque se cre¨ªa que ¨¦stos har¨ªan m¨¢s f¨¢cilmente 'el trabajo sucio'.
Los asesinos de Nikola y Milica Damjanic pertenec¨ªan a la Brigada 113 del Ej¨¦rcito croata, comandada al comienzo de la guerra por Rahim Ademi, uno de los dos generales que busca La Haya, y su identidad es hace a?os conocida por las autoridades judiciales y policiales que han comenzado a investigar el caso desde la ca¨ªda del r¨¦gimen de Tudjman.
El fallecido presidente croata, reconoce Nikica, no hizo nada por sancionar a los culpables de cr¨ªmenes de guerra. Es m¨¢s, muchos de ellos fueron condecorados y recompensados con dinero y ascensos.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.