Inmigrantes africanos 'toman' la plaza de Catalunya

En pleno centro de una de las ciudades m¨¢s confortables del planeta, Barcelona, una plaza detestada por urbanistas y escasamente utilizada por sus habitantes se est¨¢ convirtiendo en un perfecto altavoz de los problemas que se generan tambi¨¦n en el mundo desarrollado: las desigualdades sociales. La plaza de Catalunya, el principal escenario de los incidentes que se produjeron al finalizar la marcha antiglobalizaci¨®n del 24 de junio, se ha convertido en los ¨²ltimos tiempos en la vivienda improvisada de un centenar de inmigrantes subsaharianos, una cantidad que fluct¨²a a medida que unos encuentran trabajo y otros van llegando, en general animados por las noticias de que aqu¨ª encontrar¨¢n empleo. A falta de ¨¦ste, y de papeles, han optado por hacer su vida en este lugar central de la ciudad con el objetivo de resultar visibles y as¨ª provocar que instituciones y ciudadanos tomen conciencia de su situaci¨®n desesperada. Algunos de los que les precedieron en este mismo espacio consiguieron regularizar su situaci¨®n, pero m¨¢s de uno tiene ya en sus manos la carta de extradici¨®n.

Est¨¢n en la plaza, afirman, porque no tienen otro sitio al que ir y solucionan sus problemas de higiene como pueden en fuentes p¨²blicas o centros institucionales. En la plaza son palpables los problemas de suciedad y los olores originados por la pernoctaci¨®n diaria de tanta gente en un espacio reducido y la acumulaci¨®n de sus pertenencias.

Una parte de estos inmigrantes, en su mayor¨ªa j¨®venes, han dejado pa¨ªses que, como Sierra Leona y Liberia, viven sangrientos conflictos b¨¦licos cuyas im¨¢genes han horrorizado a medio mundo. Ellos huyen de la guerra y otros de sus compa?eros, simplemente de la pobreza.