El Gobierno tiene inscritos 200 grupos ecologistas pero s¨®lo una veintena funciona activamente

El registro del Gobierno vasco incluye m¨¢s de 200 colectivos, de los que cerca de 140 se pueden considerar como ecologistas propiamente dichos, 24 se engloban dentro de la educaci¨®n y divulgaci¨®n ambiental, otra veintena se relacionan espec¨ªficamente con la defensa de los animales y una quincena son asociaciones de agricultores de monta?a.

Pero esta cifra es enga?osa y la gran mayor¨ªa no funcionan y en bastantes casos ni siquiera existen, porque su ¨²nico miembro o los tres o cuatro que lo formaban hace tiempo que abandonaron su actividad. De hecho, el Gobierno cit¨® recientemente a estos dos centenares de grupos para una reuni¨®n del Consejo asesor de Medio Ambiente y s¨®lo acudieron ocho grupos.

El dato ilustra la situaci¨®n actual del movimiento verde en Euskadi, aunque hasta hace unos a?os era a¨²n peor. La formaci¨®n de la plataforma Ekologistak Martxan, la versi¨®n vasca de Ecologistas en Acci¨®n creada para toda Espa?a, ha concentrado a los grupos m¨¢s activos y posibilitado una acci¨®n m¨¢s coordinada. 'Ahora hay m¨¢s uni¨®n', se?ala Carlos Alonso, un hist¨®rico militante ecologista integrado en Ekologistak Martxan. 'Aunque los grupos que est¨¢n en ella siguen con su organizaci¨®n, y legal y formalmente tienen su identidad, en la pr¨¢ctica est¨¢n en la plataforma'.

Colectivos unidos Ekologistak Martxan ha logrado aunar a todos los grupos ecologistas con actividad regular en ?lava, los grupos locales de Eki en Guip¨²zcoa y gran parte de los vizca¨ªnos, como Sagarrak (en Basauri), el Taller de Ecolog¨ªa de Gernika y otras organizaciones en Bilbao, Barakaldo, Durango y Elorrio. Fuera de la plataforma ha quedado Eguzki, cuyo funcionamiento es irregular, los conservacionistas como Lanius y la Sociedad Espa?ola de Ornitolog¨ªa (SEO), grupos antitaurinos y los colectivos que funcionan en un solo municipio o comarca y plataformas creadas por temas concretos como la incineradora, el tren de alta velocidad o la problem¨¢tica de los residuos generados por el lindane. En total, estar¨¢n funcionando con cierta actividad entre 15 y 20 grupos, muy lejos de los m¨¢s de 200 inscritos en el registro del Departamento de Medio Ambiente.

'La actividad, indudablemente, ha sido mayor en el pasado. La participaci¨®n de la gente est¨¢ en descenso', admite Alonso que apunta dos caracter¨ªsticas actuales del movimiento verde vasco: hay menor numero de ecologistas y la edad media crece aunque la preparaci¨®n sea ahora mejor. 'Hay poca renovaci¨®n generacional. Vas a las reuniones y ves las mismas caras de hace quince a?os'.

Carlos Alonso no cree que esta menor implicaci¨®n sea exclusiva del ecologismo, sino que 'es general en los movimientos sociales y tiene que ver con la cultura y el modo de vida. Es el individualismo'.

El surgimiento de plataformas ecologistas para cuestiones concretas se explicar¨ªa por este individualismo, seg¨²n Alonso. 'El caso de la incineradora de Zabalgarbi es paradigm¨¢tico. En Erandio se movieron cuando se pretend¨ªa ubicarla all¨ª y, cuando se traslad¨® a Bilbao, ya desapareci¨® esa conciencia aunque la instalaci¨®n est¨¢ a dos kil¨®metros'.