Concentraci¨®n en Mijas para exigir la repoblaci¨®n de la zona quemada
Unas 300 personas se concentraron ayer para exigir 'un compromiso real' de repoblaci¨®n de la sierra de Mijas (M¨¢laga), tras el incendio que la semana pasada arras¨® m¨¢s de 1.000 hect¨¢reas, 550 de ellas forestales, causado por la chispa que salt¨® del motor de un coche averiado.
Lemas como Mijas por sus sierras y suelo, La sierra ardi¨® por el abandono de cunetas y arcenes. Culpable: Diputaci¨®n, c¨®mplice: el Ayuntamiento, portaron los asistentes a la concentraci¨®n, promovida por el colectivo ciudadano Tamisa. En el acto se ley¨® un escrito en el que se exige la creaci¨®n de un ret¨¦n municipal provisional por el Ayuntamiento, as¨ª como destinar 'menos dinero para el modelo de turismo salvaje', que concretaron en la creaci¨®n de campos de golf y la urbanizaci¨®n 'descontrolada'.
Tanto el Ayuntamiento de Mijas, gobernado por el socialista Agust¨ªn Moreno, como la Junta, han recibido duras cr¨ªticas desde el incendio. El grupo popular en la Diputaci¨®n lleg¨® a pedir la dimisi¨®n del alcalde en el pleno celebrado esta semana por no tener un dispositivo antiincendios -Mijas carece de parque de bomberos- en un municipio cuyos habitantes viven mayoritariamente en urbanizaciones rodeadas de bosque.
Las cr¨ªticas a la Junta llegaron el pasado viernes desde el sindicato UPLB, que denunci¨® que la Administraci¨®n auton¨®mica no envi¨® a ning¨²n responsable para coordinar las labores de extinci¨®n. Tambi¨¦n denunci¨® el sindicato la inexistencia de planes de autoprotecci¨®n frente a incendios en la mayor¨ªa de las urbanizaciones del extens¨ªsimo t¨¦rmino municipal mije?o, y reclam¨® que las administraciones impidan la acumulaci¨®n de le?a y rastrojos en el entorno de las casas.
El incendio, que calcin¨® casi el triple de la superficie afectada por este tipo de siniestros en toda la provincia de M¨¢laga durante el a?o 2000 (340 hect¨¢reas), se origin¨® la noche del mi¨¦rcoles d¨ªa 19, cuando el veh¨ªculo en el que se desplazaban por la zona de Valtocado dos residentes extranjeros se averi¨® y, al abrir el cap¨®, salt¨® una chispa que prendi¨® r¨¢pidamente en el terreno.
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