Espa?a no, Espa?a s¨ª
Dijo que iba a votar contra de los santuarios y se ech¨® atr¨¢s por no quedar mal ante la opini¨®n p¨²blica. La delegaci¨®n espa?ola ante la Comisi¨®n Ballenera Internacional en Londres anunci¨® d¨ªas antes de que se sometieran a votaci¨®n los santuarios (zonas donde se proh¨ªben las capturas) para ballenas en el Pac¨ªfico Sur y el Atl¨¢ntico Sur, que su voto ser¨ªa negativo. Con este gesto Espa?a pretend¨ªa devolver la afrenta que los pa¨ªses proponentes (Australia y Nueva Zelanda) hab¨ªan propinado a la UE al excluirla de los organismos que gestionan los caladeros del Pac¨ªfico. La bofetada a estos pa¨ªses en el lomo de las ballenas romp¨ªa la tradicional pol¨ªtica espa?ola de protecci¨®n a estos animales. Espa?a fue pionera en capturar ballenas y fue tambi¨¦n la primera en promover la moratoria de 1986, lo que supuso la reconversi¨®n de su flota.
La Sociedad Espa?ola de Cet¨¢ceos, en la que se integran m¨¢s de mil especialistas, y Grenpeace se alarmaron y pidieron al ministro de Agricultura y Pesca reconsiderar la orientaci¨®n de su voto. El ministerio acab¨® votando a favor de los santuarios, pero su apoyo no fue suficiente, frente al de los peque?os pa¨ªses que lo hicieron en contra a cambio de ayuda econ¨®mica japonesa.
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