El chorizo
El chorizo es el embutido hisp¨¢nico por excelencia, aunque los llamados paises catalanes sean los menos propensos a esta chacina, compensan la escasez de embutidos con piment¨®n rojo con la sobrasada, delicia de dioses mediterr¨¢neos y lustrosos. El chorizo pasar¨¢ a la historia de la nueva democracia espa?ola gracias a una frase gloriosa urdida por un diputado socialista, entonces en la oposici¨®n contra los gobiernos de UCD. A raiz de un esc¨¢ndalo econ¨®mico, dijo el se?or Mart¨ªnez que no hab¨ªa en Espa?a suficiente trigo para elaborar el pan que necesitaba tanto chorizo. La frase, volvi¨® a tener sentido cuando al partido socialista se le descubrieron en los pulmones algunas cloacas y cuevas de Al¨ª Bab¨¢ y regresa cuando el PP no tiene m¨¢s remedio que propiciar una comisi¨®n parlamentaria sobre Gescartera.
El talento pre o postrealista de Mill¨¢s le permiti¨® una de sus m¨¢s gloriosas columnas sobre la relaci¨®n entre poder y delincuencia, v¨ªnculo convencionalmente asumido en tiempos de dictadura, pero que precisa puntero explicativo en democracia. Desde el presidente Bush hasta los responsables de Gescartera se desciende por una pir¨¢mide de inquientante poder pendiente sobre cabezas y espaldas de los s¨²bditos. Que nuestro emperador tenga alma de verdugo y conciencia de ecodepredador nos deber¨ªa aterrar tanto que no vale la pena aterrarse y que en Espa?a estalle un caso de corrupci¨®n que entre otros olores retiene el de la sotana, otros uniformes, m¨¢s el dinero negro, nos pilla de vuelta de cualquier posibilidad de sorpresa pero no de melancol¨ªa.
Porque calculando a cuanto tocar¨ªamos por cabeza si se repartieran todos los dineros desaparecidos gracias a la alquimia financiera por no llamarla ya ingenier¨ªa, igual podr¨ªamos vivir subsidiados todos los espa?oles y ser felices aunque frugales, algo as¨ª como hidalgos arruinados entre dos guerras civiles, guisando pescaito frito y poniendo el culo para los turistas, tr¨¢tese de bailarles la rumba gitana, tr¨¢tese de bailarles el agua. Ya s¨¦ que hay graves esc¨¢ndalos de corrupci¨®n m¨¢s al Norte. Re¨²nen el perfume del petr¨®leo y del Chanel 5 con el desodorante m¨¢s adecuado para ministros sin axilas y concubinas sin flor. Aqu¨ª seguimos oliendo a chorizo.
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