300 personas vuelan ocho horas con un charco de or¨ªn en el avi¨®n

La mayor parte de los 300 pasajeros del vuelo Spanair 6610, que hizo ayer el recorrido Punta Cana (Rep¨²blica Dominicana)-Madrid, pas¨® las ocho horas del vuelo con un charco de or¨ªn en el suelo del avi¨®n. Algunos denunciaron, adem¨¢s, que en la aeronave hab¨ªa pulgas que les produjeron numerosas picaduras en las piernas.

Los viajeros presentaron sus reclamaciones en la ventanilla de la compa?¨ªa a¨¦rea en el madrile?o aeropuerto de Barajas. Spanair afirma que el avi¨®n es de la compa?¨ªa portuguesa Euro Atlantic, que hab¨ªa sido alquilado por los turoperadores Pullmantur y Club de Vacaciones. Las agencias de viajes vendieron los billetes del vuelo ch¨¢rter en un paquete de oferta que costaba 600.000 pesetas y que inclu¨ªa una estancia de 15 d¨ªas en un hotel de cinco estrellas en Punta Cana.

El avi¨®n deb¨ªa salir de esta localidad a las 20.00 del martes, hora local, pero sufri¨® una demora de una media hora porque uno de los servicios estaba averiado. Al embarcar en el avi¨®n, los pasajeros se encontraron con la mitad trasera de la aeronave encharcada de or¨ªn y con un olor pestilente.

Muchos rehusaron a sentarse en sus asientos porque se negaban a realizar un viaje de ocho horas en esas condiciones y se amotinaron. Exigieron que el avi¨®n se limpiase antes de despegar pero no les hicieron ning¨²n caso. La tensi¨®n aument¨® y comenz¨® una discusi¨®n con la tripulaci¨®n. 'El avi¨®n ol¨ªa a excrementos, a meado... Todo el agua residual del servicio se hab¨ªa derramado y el suelo, la moqueta del avi¨®n, estaba encharcada. Cuando caminabas salpicaba y hac¨ªa 'chof chof' al pisar. Era asqueroso', explic¨® ayer una pasajera, Juana Mar¨ªa Corraliza S¨¢nchez, empleada de banca.

'Como si fueran cataratas'

El comandante del avi¨®n dijo por los altavoces que se trataba de un problema que 's¨®lo afectaba al confort del avi¨®n, no a la seguridad' y orden¨® a los pasajeros que se sentaran porque la aeronave ten¨ªa que despegar. En el momento del despegue, cuando el avi¨®n levant¨® el morro del suelo, 'el agua con or¨ªn sal¨ªa del ba?o a chorros, como si fueran cataratas', explic¨® otro viajero.

Los pasajeros que se sentaban en las primeras filas de la segunda mitad del avi¨®n, justo ante la pantalla de televisi¨®n, extendieron sobre el charco de or¨ªn las mantas de abrigo que les dieron en el avi¨®n y se taparon con pa?uelos la boca y la nariz para reducir el 'nauseabundo olor', seg¨²n Corraliza. Algunos pasajeros afirmaron adem¨¢s que ten¨ªan numerosas picaduras en las piernas: 'Cuando estaba comiendo sent¨ªa unos picores en los tobillos. Y las picaduras no las ten¨ªa cuando me mont¨¦ en el avi¨®n', explic¨® uno de los afectados.

Un portavoz de Pullmantur admiti¨® ayer que un servicio del avi¨®n estaba averiado pero se sigui¨® utilizando. 'Le hemos solicitado a la compa?¨ªa a¨¦rea portuguesa un informe de lo ocurrido y no cabe duda que le exigiremos responsabilidades', a?adi¨®.