Schuster se hace profesor
El ex futbolista alem¨¢n inicia su aventura espa?ola como entrenador desde el modesto banquillo del Xerez
Dos balones quedan sueltos m¨¢s all¨¢ del ¨¢rea. Y Schuster acaba de dirigir su primera orden, y la ¨²ltima, a los jugadores, durante uno de los duros entrenamientos de pretemporada: se acab¨®, a los vestuarios. Schuster se aproxima a su juguete favorito, coloca el cuerpo, golpea y con la habilidad y maestr¨ªa que exhibi¨® en Espa?a durante tantas temporadas los pone en la escuadra. Bernd Schuster es el t¨¦cnico elegido por el Xerez Deportivo para afrontar el regreso a la Segunda Divisi¨®n. Con unos kilos de m¨¢s y su eterna melena rubia, el alem¨¢n comenzar¨¢ dentro de una semana su carrera como entrenador en la Liga espa?ola, que, a poco que sea igual a la que tuvo como jugador, dar¨¢ mucho que hablar: 'Mi etapa como jugador ya no sirve de nada pero est¨¢ claro que si no te dan una oportunidad no puedes demostrar nada', asume el germano.
A finales de junio, Luis Oliver, presidente de la entidad, cerr¨® el fichaje de Schuster, que cobrar¨¢ 40 millones de pesetas durante esta temporada y que percibir¨¢ 100 en el caso de ser destituido. El germano se decidi¨® por la oferta del equipo andaluz despu¨¦s de no aceptar el cargo de seleccionador griego y fracasar en sus intentos por colocarse en sitios de mayor post¨ªn, aunque en puesto m¨¢s bajo: se ofreci¨® a Luis Aragon¨¦s para ser su ayudante en el Atl¨¦tico de Madrid.
Schuster es la gran atracci¨®n del Xerez. Ni la llegada de Jordi Lard¨ªn, cedido por el Atl¨¦tico, o el argentino Rub¨¦n Mago Capria le hacen sombra. El equipo viaja a El Ejido a disputar un partido amistoso y es recibido con abucheos. Cuando el alem¨¢n se dirige hacia su banquillo es recibido con una ovaci¨®n. Nadie olvida la categor¨ªa de un hombre que engrandeci¨® el oficio de centrocampista. 'Tenerle como entrenador es un orgullo, de peque?o era el espejo donde me miraba', coment¨® Dani Cobo cuando fich¨® por el Xerez. Tan a gala lleva el presidente el fichaje de Schuster que pens¨® hacer su presentaci¨®n en la Real Escuela de Arte Ecuestre, un purasangre alem¨¢n de tanta raza no desmerec¨ªa a tan ilustre emplazamiento.
De momento, el equipo se mueve en un ambiente que ¨¦l conoce muy bien. Ayuntamiento y directiva se han declarado la guerra, el alcalde ha prohibido al equipo jugar en el estadio municipal de Chap¨ªn y tendr¨¢ que disputar sus encuentros como local en la localidad cercana de Sanl¨²car de Barrameda. En esta situaci¨®n, el capit¨¢n del equipo Juan Pedro se ha enfrentado al presidente, Luis Oliver, y parece defender la postura de la alcald¨ªa. Al t¨¦cnico no le ha gustado nada esta actitud y durante uno de los ¨²ltimos entrenamientos mantuvo una recriminatoria charla con el jugador. Ahora al alem¨¢n le toca ver las cosas desde otro prisma. Si esta situaci¨®n se hubiera dado en Real Madrid, Barcelona o Atl¨¦tico de Madrid durante su ¨¦poca como futbolista, Bernd Schuster podr¨ªa haber interpretado perfectamente el papel que ahora representa Juan Pedro. A uno de los jugadores m¨¢s rebeldes que jam¨¢s ha pisado un campo de f¨²tbol y que se enfrent¨® a todo presidente que se cruz¨® en su camino le toca ahora hacer respetar las normas.
Una vez confirmado su fichaje, la afici¨®n se imagin¨® a un equipo jugando a imagen y semejanza de c¨®mo lo hac¨ªa su t¨¦cnico. Pronto Schuster puso el pie en el freno: 'Cre¨ªa que lo m¨¢s importante en el f¨²tbol era jugar bonito, pero en cuanto perd¨ª dos partidos seguidos jugando as¨ª, me di cuenta de que ten¨ªa que cambiar. Si no est¨¢s bien f¨ªsicamente no disfrutas jugando, no llegas, est¨¢s lento. ?sa es la clave', reconoce el alem¨¢n.
El Xerez mantuvo a cero su porter¨ªa en los seis primeros partidos de pretemporada y las palizas que el preparador f¨ªsico alem¨¢n Uwe Speidel somete a los jugadores son de ¨®rdago. La permanencia en Segunda, ?sa es la vara que medir¨¢ el ¨¦xito o el fracaso de Schuster en su primera aventura como entrenador en el f¨²tbol espa?ol.
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