Julio Medem se sumerge con su nueva pel¨ªcula en la alegr¨ªa y la culpa del sexo
El director vasco une a Najwa Nimri, Paz Vega, Trist¨¢n Ulloa y Elena Anaya en una historia cruzada. Rodado ¨ªntegramente con c¨¢mara digital de alta definici¨®n, el filme se estrena el pr¨®ximo viernes
Julio Medem (San Sebasti¨¢n, 1958) se sienta por primera vez en toda la ma?ana. Un men¨² japon¨¦s, que a duras penas termina, le sirve para recuperar fuerzas. A las siete de la tarde viajar¨¢ a Bilbao, donde hoy se presenta su ¨²ltima pel¨ªcula, Luc¨ªa y el sexo. Interpretada por Paz Vega, Najwa Nimri, Elena Anaya y Trist¨¢n Ulloa, la quinta pel¨ªcula del director de Vacas y Los amantes del C¨ªrculo Polar narra varias historias cruzadas con un elemento com¨²n: el sexo como motor de cada una de ellas. El sexo como fuente de vida y de alegr¨ªa, y el sexo como fuente de culpa y destrucci¨®n.
Rodada entre Madrid y la isla de Formentera, la pel¨ªcula inaugura adem¨¢s un sistema de rodaje en alta definici¨®n - el Hdcam- que jam¨¢s se hab¨ªa utilizado para un largometraje en Europa y que en Estados Unidos lo estren¨® George Lucas para su cuarta entrega de la saga de La guerra de las Galaxias.
Un sistema que, seg¨²n Medem, logra mayor intimidad entre el director y los int¨¦rpretes. 'Hay menos gente entre la c¨¢mara y el actor, hay m¨¢s libertad, m¨¢s ligereza a la hora de trabajar'. 'Con una c¨¢mara as¨ª', a?ade Medem, 'puedo rodar con un sistema de trabajo muy similar al que utilizo cuando ensayo. Adem¨¢s, no hay l¨ªmites de tiempo y se puede rodar en condiciones de luz muy extremas'.
Luc¨ªa y el sexo se present¨® ayer en Madrid, hoy lo har¨¢ en Bilbao y ma?ana en Barcelona. El jueves, el equipo volver¨¢ a la capital para el preestreno, esa misma noche, del filme. El viernes, con 110 copias en la calle, la pel¨ªcula estar¨¢ en las salas comerciales de toda Espa?a. Despu¨¦s del ¨¦xito comercial y de cr¨ªtica que cosech¨® su anterior trabajo, Los amantes del C¨ªrculo Polar, Medem ha dejado de ser un autor minori-tario.
'Una pel¨ªcula es un trabajo tan duro', dice el director con su habitual tono pausado. 'Si no le pones toda la ilusi¨®n del mundo no sale adelante. A veces me pregunto d¨®nde nace la energ¨ªa para hacer una pel¨ªcula. Se necesita tanto tiempo y tantas ganas... La verdad es que hay ser algo ingenuo para generar toda la ilusi¨®n que hace falta'.
A Medem no le gustan las entrevistas, pero el marat¨®n que exige la promoci¨®n de su nuevo trabajo no le hace perder la buena cara. Est¨¢, eso s¨ª, m¨¢s serio que de costumbre. Procura disimular la timidez y los nervios. 'Es que tu trabajo te tiene que gustar mucho porque si no te gusta a ti, ?ad¨®nde vas?, ?c¨®mo convences a los dem¨¢s?, ?c¨®mo embarcas a los actores?'. El director sonr¨ªe: 'En este trabajo la autosugesti¨®n es muy importante. ?Te lo tienes que creer!'.
Sugesti¨®n
Para Julio Medem, Luc¨ªa y el sexo tiene mucho de eso, de sugesti¨®n, de la capacidad de la ficci¨®n para transformar la realidad. La pel¨ªcula cuenta una historia cruzada en la que est¨¢n presentes casi todas las preocupaciones existenciales del director de Vacas: el amor, el sexo, el peso del pasado, la muerte... Un cine que recoge las angustias vitales de un director que, pese a lo que siempre se ha destacado de su cine, asegura no tener voluntad de estilo. 'Y si tengo un estilo reconocible, es a mi pesar. A m¨ª me gustar¨ªa ser completamente diferente en cada pel¨ªcula'. En Luc¨ªa y el sexo, una mujer (Najwa Nimri) tiene una casa de hu¨¦spedes en una isla. All¨ª, la protagonista de la pel¨ªcula, Luc¨ªa (Paz Vega), huye de su pasado. A las dos mujeres les une un pasado com¨²n: el sexo.
El sexo las uni¨® en diferentes momentos con el mismo hombre. A la primera le dej¨® una huella imborrable: una hija. A la otra, seis a?os de feliz convivencia. 'Lo que me interesa del sexo es la idea del sexo como un generador de fantas¨ªas, de f¨¢bulas', dice el director. 'El sexo en su forma m¨¢s l¨²dica, el sexo como un motor de im¨¢genes', contin¨²a. La necesidad de que en el filme el sexo fuera lo m¨¢s expl¨ªcito posible responde, seg¨²n el director, a la necesidad de ver muy de cerca la cotidianeidad de una pareja y, por otro, ver tambi¨¦n de cerca las fantas¨ªas de uno de los miembros de esa pareja.
'El sexo es energ¨ªa, el sexo nos obliga a hacernos preguntas. Nos obliga a imaginar situaciones. Todos tenemos fantas¨ªas inconfesables. Miramos a alguien y nos preguntamos qu¨¦ har¨ªamos con esa persona. Nos respondemos tambi¨¦n a solas, sin que nadie nos escuche. Se establece una relaci¨®n con nuestra imaginaci¨®n que no tiene nada que ver con nuestros compromisos sentimentales'.
'Lo que m¨¢s me fascina de este trabajo es la capacidad para crear situaciones que no son tu vida, pero que tiran igualmente de ti. Todos tenemos un subconsciente complej¨ªsimo. Este trabajo me ayuda a interpretar mis sue?os, y al acceder al subconsciente logras sacar algo muy profundo que no siempre pensabas que exist¨ªa. Es un proceso que te hace cambiar y evolucionar'.
'Aunque mucha gente cree lo contrario, a m¨ª el trabajo en equipo me importa, y mucho', manifiesta el cineasta. 'El equipo me aporta muchas ideas. A los actores les dejo hacer, me gusta que incorporen sus experiencias a las m¨ªas y entre todos hacer crecer las situaciones'.
Medem cuenta c¨®mo Luc¨ªa y el sexo surgi¨® durante la promoci¨®n de Los amantes del C¨ªrculo Polar. 'Me fui a descansar a Formentera con una peque?a c¨¢mara digital, quer¨ªa rodar algo m¨¢s luminoso, c¨¢lido y bonito. Al principio pens¨¦ en hacer una pel¨ªcula muy peque?a, montar una cooperativa con unos amigos. Pero luego surgieron las otras historias...'. Luc¨ªa y el sexo fue primero Luc¨ªa y un rayo de sol. Al sol le sigui¨® La novela del sexo y de la fusi¨®n de ambas naci¨® la pel¨ªcula final.
Fr¨¢gil
'Pese a lo que muchos creen, yo me trabajo mucho los guiones', contin¨²a el director. 'Sab¨ªa que esta historia la ten¨ªa que contar muy bien y eso era un reto para m¨ª'. Medem es consciente del peligro que supone moverse en el fr¨¢gil terreno donde uno trabaja con sus propios fantasmas y conseguir traducirlos en una trama que no resulte alambicada. A pesar de que sus tres primeras pel¨ªculas (Vacas, La ardilla roja y Tierra) no pasaron de los circuitos de cine minoritarios a ra¨ªz de su anterior filme, Los amantes del C¨ªrculo Polar, los espectadores de su cine crecieron notablemente, la pel¨ªcula fue un ¨¦xito que logr¨® recaudar m¨¢s que las tres anteriores juntas. 'La verdad es que yo nunca pens¨¦ que Los amantes iba a tener el ¨¦xito que finalmente tuvo y por eso mismo me plante¨¦ trabajar con una c¨¢mara digital en mi siguiente proyecto, quer¨ªa prepararme para hacer pel¨ªculas m¨¢s baratas'.
Luc¨ªa y el sexo, adem¨¢s de novedades tecnol¨®gicas, incorpora un grupo de actores nuevos en la filmograf¨ªa del director. S¨®lo Najwa Nimri hab¨ªa trabajado anteriormente con ¨¦l. Todos ellos coinciden al subrayar con entusiasmo la particular fascinaci¨®n que les provoca el mundo que crea a su alrededor este cineasta. Como se?ala una de sus actrices: 'Con Julio lo mejor es dejarse llevar y, sin pensar en nada, abandonarse'.
Sirenas y actrices porno
En Luc¨ªa y el sexo hay mujeres que son madres y sirenas, hay mujeres que se masturban viendo v¨ªdeos porno y hay mujeres que buscan un rayo de sol. Realidad y fantas¨ªa se mezclan en el juego metaficcional del protagonista del filme, un escritor que le inventa una sirena a su hija secreta a la vez que se sumerge en el cuento er¨®tico que le regala la ni?era de la ni?a. 'En el centro de esta historia hay un agujero', dice Julio Medem. 'Es el agujero que ha socavado con ¨¢nimo de juego el escritor y por el que se caen todos los personajes, a excepci¨®n de Luc¨ªa'. Una Luc¨ªa que escucha como otro personaje le cuenta que la isla donde est¨¢ no es una isla, sino un trozo de tierra que flota como una balsa. 'Yo he buceado por debajo de toda la isla', le dice el personaje, interpretado por el actor argentino Daniel Freire, un submarinista que conoce 'todas las cuevas... y nada, no he visto un solo trozo de roca que una la isla al mar. Los d¨ªas de mar gruesa', sigue contando el submarinista, 'la gente de aqu¨ª se marea y nadie sabe por qu¨¦'. Luc¨ªa y el sexo ocurre en esa isla y en Madrid. 'El sexo es Madrid, en la isla no hay sexo', dice Medem. 'El sexo es pasado', a?ade el director. Medem insiste en agradecer a los actores de su quinto filme 'la entrega' que han tenido. 'No es por incurrir en el t¨®pico, es que de verdad creo que se han entregado de una manera muy especial a la pel¨ªcula. El grado de implicaci¨®n era muy importante y ellos han sabido quitarse el pudor. Ten¨ªa que rodar a mis anchas, y ellos me han dejado'. Los actores repet¨ªan ayer que hab¨ªa sido un rodaje muy dif¨ªcil, duro e intenso, pero que por eso mismo hab¨ªa sido especialmente gratificante. S¨®lo una actriz, Najwa Nimri, que tiene en sus manos el momento m¨¢s dram¨¢tico del filme, se sali¨® del discurso de los dem¨¢s: 'Para m¨ª no fue dif¨ªcil, para m¨ª fue lo m¨¢s incre¨ªble que he hecho hasta ahora. He aprendido a interpretar de otra manera. He seguido un camino distinto. Julio me regal¨® un cuento diferente..., un cuento lleno de ventajas'.
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