Las guerras de Ampuero

Desde las novelas policiales que protagoniza su investigador privado Cayetano Brul¨¦ hasta la meticulosa descripci¨®n de su desencanto con la Cuba castrista en Nuestros a?os verde olivo, el chileno Roberto Ampuero, uno de los autores m¨¢s conocidos de la hornada que ha crecido junto con la recuperaci¨®n de la democracia chilena, muestra oficio narrativo. En su ¨²ltimo libro conocido en Chile, escrito originalmente en alem¨¢n mientras Ampuero se encontraba en el exilio y despu¨¦s retocado para su edici¨®n en espa?ol, La guerra de los duraznos (Andr¨¦s Bello), aborda la disputa entre dos pandillas de adolescentes en los cerros de Valpara¨ªso, en plena dictadura, un periodo que ya es habitual en las letras locales. El autor muestra el r¨¦gimen de Pinochet a trav¨¦s de ojos inocentes, sit¨²a como reflejo de una sociedad violenta la batalla con duraznos que entablan las pandillas de panteras y escorpiones y muestra a los muchachos dispuestos a ayudar a un perseguido por la DINA. Nacido en Chile en 1953, Ampuero protagoniz¨® este a?o una dura guerra a trav¨¦s de la prensa con quien fuera su suegro, Fernando Flores Ibarra, ex fiscal cubano y embajador en los primeros a?os despu¨¦s de la revoluci¨®n, conocido como 'charco de sangre' y acusado de haber enviado a muchos al pared¨®n. Flores, seg¨²n ¨¦l retratado por Ampuero en Nuestros a?os verde olivo como el embajador Ulises Cienfuegos, que en ese libro lo amenaza para terminar la relaci¨®n con su hija, acus¨® al novelista de oportunista: 'Ser¨ªa hoy un don nadie si no hubiese tenido la suerte de vivir en Cuba. Gracias a la revoluci¨®n cubana y a sus suegros tuvo casa, comida y ropa limpia'. Ampuero replic¨® tambi¨¦n con acritud: sostuvo que Flores no es descrito en su obra, lo acus¨® de totalitario, de no estar arrepentido y de gozar en Chile de las ventajas del capitalismo al que combate. Flores tambi¨¦n escribe y acaba de publicar Yo fui enemigo de Fidel (LOM), un testimonio autobiogr¨¢fico con una mirada sobre la Cuba revolucionaria situada en los ant¨ªpodas de Ampuero. Al final, ambos tratan de delinear la sombra de dos hombres que han hecho historia.Desde las novelas policiales que protagoniza su investigador privado Cayetano Brul¨¦ hasta la meticulosa descripci¨®n de su desencanto con la Cuba castrista en Nuestros a?os verde olivo, el chileno Roberto Ampuero, uno de los autores m¨¢s conocidos de la hornada que ha crecido junto con la recuperaci¨®n de la democracia chilena, muestra oficio narrativo. En su ¨²ltimo libro conocido en Chile, escrito originalmente en alem¨¢n mientras Ampuero se encontraba en el exilio y despu¨¦s retocado para su edici¨®n en espa?ol, La guerra de los duraznos (Andr¨¦s Bello), aborda la disputa entre dos pandillas de adolescentes en los cerros de Valpara¨ªso, en plena dictadura, un periodo que ya es habitual en las letras locales. El autor muestra el r¨¦gimen de Pinochet a trav¨¦s de ojos inocentes, sit¨²a como reflejo de una sociedad violenta la batalla con duraznos que entablan las pandillas de panteras y escorpiones y muestra a los muchachos dispuestos a ayudar a un perseguido por la DINA. Nacido en Chile en 1953, Ampuero protagoniz¨® este a?o una dura guerra a trav¨¦s de la prensa con quien fuera su suegro, Fernando Flores Ibarra, ex fiscal cubano y embajador en los primeros a?os despu¨¦s de la revoluci¨®n, conocido como 'charco de sangre' y acusado de haber enviado a muchos al pared¨®n. Flores, seg¨²n ¨¦l retratado por Ampuero en Nuestros a?os verde olivo como el embajador Ulises Cienfuegos, que en ese libro lo amenaza para terminar la relaci¨®n con su hija, acus¨® al novelista de oportunista: 'Ser¨ªa hoy un don nadie si no hubiese tenido la suerte de vivir en Cuba. Gracias a la revoluci¨®n cubana y a sus suegros tuvo casa, comida y ropa limpia'. Ampuero replic¨® tambi¨¦n con acritud: sostuvo que Flores no es descrito en su obra, lo acus¨® de totalitario, de no estar arrepentido y de gozar en Chile de las ventajas del capitalismo al que combate. Flores tambi¨¦n escribe y acaba de publicar Yo fui enemigo de Fidel (LOM), un testimonio autobiogr¨¢fico con una mirada sobre la Cuba revolucionaria situada en los ant¨ªpodas de Ampuero. Al final, ambos tratan de delinear la sombra de dos hombres que han hecho historia.