Eurodiputados del PPE votar¨¢n a un socialista para presidir la C¨¢mara

Varios eurodiputados del Grupo Popular Europeo (PPE) han anunciado que votar¨¢n a un candidato socialista para presidir el Parlamento Europeo durante la segunda parte de la actual legislatura, con el fin de evitar que resulte elegido el liberal irland¨¦s Patrick Cox, ahora acusado de no tener una postura firme contra el terrorismo. Al inicio de la actual legislatura, el Grupo Popular y los liberales pactaron repartirse la presidencia entre Nicole Fontaine (PPE) y Cox. Los socialistas han advertido de que no asumen tal pacto y ayer dijeron que presentar¨¢n como candidato al laborista brit¨¢nico David Martin.

Como ya ha ocurrido en anteriores ocasiones, populares (233 de los 626 esca?os) y socialistas (180 esca?os) negociaron en 1999, a comienzos de la actual legislatura, repartirse la presidencia entre los dos grupos mayoritarios de la Euroc¨¢mara. Los socialistas exigieron presidir la primera parte, por lo que no fue posible el pacto. Por eso, el Grupo Popular acab¨® pactando con los liberales, el tercer grupo de la C¨¢mara europea (51 eurodiputados).

El relevo tiene que producirse en enero pr¨®ximo, pero los movimientos en unos y otros grupos ya han comenzado. Ayer, fecha tope para conocer si habr¨¢ candidaturas entre los socialistas, s¨®lo lo hizo David Martin, quien con toda seguridad ser¨¢ respaldado como candidato oficial del grupo socialista ma?ana mismo en Estrasburgo. Antes de fin de a?o, y en el pleno de la Euroc¨¢mara, se realizar¨¢ la votaci¨®n para elegir al sustituto de Fontaine. El voto es secreto y el candidato debe ser apoyado por la mayor¨ªa de la C¨¢mara.

Escasas simpat¨ªas

Cox cuenta hoy con escasas simpat¨ªas en el seno del Grupo de los Populares Europeos. En primer lugar, porque se ha decantado p¨²blicamente a favor de f¨®rmulas negociadoras para resolver problemas de violencia como la que existe en el Pa¨ªs Vasco. Entre los populares espa?oles (28 esca?os), por ejemplo, no s¨®lo existe el convencimiento de que apenas contar¨¢ con sus votos, sino que incluso algunos de esos eurodiputados no ahorran sus cr¨ªticas abiertas al candidato Cox. Se trata, adem¨¢s, de elegir al sucesor de Fontaine, quien precisamente se ha destacado por sus cerradas condenas de toda actividad terrorista.

De otro lado, la nacionalidad del irland¨¦s Cox tambi¨¦n est¨¢ jugando en su contra, s¨®lo unos meses despu¨¦s de que el electorado de Irlanda haya rechazado en refer¨¦ndum el Tratado de Niza, indispensable para la ampliaci¨®n de la UE, tras una campa?a en la que los pol¨ªticos europe¨ªstas apenas se mojaron a favor del voto afirmativo.

David Martin, vicepresidente de la Euroc¨¢mara desde 1989 y eurodiputado desde 1984, es profesor de la Universidad de Glasgow, es un europe¨ªsta que goza de gran prestigio en la C¨¢mara europea. Su posible elecci¨®n como presidente, adem¨¢s, puede desembocar tambi¨¦n en un proceso para decidir si el espa?ol Enrique Bar¨®n contin¨²a o no presidiendo el Grupo de los Socialistas Europeos.