Vitoria resume en 60 obras la escultura del siglo XX

Son piezas de peque?o tama?o, el ideal para poder conocer en una sala de exposiciones el recorrido por la escultura de la centuria pasada, la que ha vivido la mayor transformaci¨®n de todas las artes en ese periodo. La revoluci¨®n de la escultura en el siglo XX se inaugur¨® ayer en la sala de exposiciones de la Caja Vital (Postas, 13-15) y ofrece un paseo que comienza por Rodin y Maillol para terminar en las aportaciones de Eduardo Chillida y Jorge Oteiza.

En total, son 60 obras, ordenadas cronol¨®gicamente, de 27 artistas, entre ellos 11 espa?oles. El recorrido va introduciendo al visitante en esa evoluci¨®n que (sin abandonar los materiales tradicionales como el bronce, en el que se presenta la mayor parte de las piezas) supera cualquier tipo de figuraci¨®n. Las m¨¢scaras de Rodin apuntan ese inter¨¦s inicial por superar una creaci¨®n deudora, todav¨ªa a finales del XIX, del Barroco, tal y como se?al¨® la comisaria de la muestra, Marisa Oropesa.

El itinerario contin¨²a con otros autores figurativos que beben de la tradici¨®n cl¨¢sica, como Clar¨¤ o Julio Antonio, a quienes ya tomar¨¢n el relevo los escultores que se empiezan a adentrar en las vanguardias. Es el caso de Manolo Hugu¨¦ o Medardo Rosso, uno de los cuatro italianos que participan en esta selecci¨®n.

De esta nacionalidad es tambi¨¦n Arturo Martini, exponente de una creaci¨®n vinculada al Futurismo, paralela a la relaci¨®n con esta corriente del espa?ol Alberto S¨¢nchez. Son momentos, los de esos primeros decenios de siglo, en los que conviven distintos movimientos, de los que la exposici¨®n ha recogido sus aportaciones.

As¨ª, del cubismo, se ofrecen varias creaciones de Pablo Picasso, quien aprendi¨® su trabajo de otro escultor imprescindible como Julio Gonz¨¢lez, figura indispensable en la historia del arte espa?ol del siglo XX. Semejante calificaci¨®n pueden tener tambi¨¦n Salvador Dal¨ª o Joan Mir¨®, a quienes se recuerda como representantes del surrealismo. Vinculado a esta corriente tambi¨¦n estuvo Alberto Giacometti, mientras que Hans Arp se lig¨® al dada¨ªsmo, como Man Ray.

Con estos precedentes, el trabajo de Henry Moore, Marini, Manz¨², Calder o Beuys, en el extranjero; Oteiza y Chillida, en el Pa¨ªs Vasco, reflejan las creaciones de mediados de centuria, precedentes de lo que el cr¨ªtico Jos¨¦ Mar¨ªn-Medina califica en el cat¨¢logo como la llegada de la 'ausencia ontol¨®gica' a la escultura. Pero ¨¦sa es la historia de este arte en el siglo XXI.