Nueve espa?oles, dados por desaparecidos
Un empleado de banca de origen burgal¨¦s fue localizado en uno de los hospitales de Manhattan
Nueve espa?oles -dos turistas y siete residentes- pueden haber desaparecido en los atentados de las Torres Gemelas. Entre ellos figura una joven embarazada de siete meses, seg¨²n confirm¨® ayer el consulado espa?ol en Nueva York. Los datos siguen siendo muy escasos. Es dif¨ªcil recabar cualquier informaci¨®n sobre la identidad de los m¨¢s de 2.000 heridos debido a la confusi¨®n en los hospitales y a la dificultad de distinguir entre apellidos de origen latino y residentes o turistas de nacionalidad espa?ola. Uno de ellos es un empleado de banca de origen burgal¨¦s, Edelmiro Abad, de 55 a?os. El consulado ha tenido que prestar dinero y facilitar alojamiento a las m¨¢s de doscientas personas que siguen sin poder regresar a Espa?a.
La joven espa?ola desaparecida ha sido identificada como Silvia Samp¨ªo, hija de Jos¨¦ Luis Samp¨ªo, uno de los abogados del bufete de Antonio Garrigues Walker, seg¨²n confirmaron fuentes de este despacho jur¨ªdico en Madrid. Trabajaba en Carr Futures, la sociedad de inversiones del banco franc¨¦s Cr¨¦dit Agricole situada en la planta 92? de una de las torres. Su padre intentaba ayer conseguir plaza en uno de los primeros vuelos que salgan rumbo a Nueva York.
El consulado no ha comunicado la identidad de los otros ocho supuestos desaparecidos. Ninguno de ellos trabajaba en las torres, pero no se tienen noticias suyas desde la tragedia. En los primeros momentos de la explosi¨®n, el consulado, al igual que el resto de las representaciones diplom¨¢ticas europeas, elabor¨® una lista de m¨¢s de cien personas posiblemente afectadas y que, al final, ha quedado resumida a estas nueve personas.
Pero es a¨²n mucho m¨¢s dif¨ªcil conseguir informaci¨®n sobre los heridos, dado que la mayor¨ªa de las m¨¢s de 2.000 personas internadas en los hospitales no tiene papeles y porque los nombres de apariencia espa?ola tambi¨¦n pueden corresponder a norteamericanos de origen latino. 'Esto est¨¢ dificultando considerablemente las labores de identificaci¨®n', dijo ayer el c¨®nsul espa?ol en Nueva York, Emilio Cassinello.
El ¨²nico herido de origen espa?ol identificado es Edelmiro Abad, un empleado de banca nacido en Espa?a, aunque de nacionalidad norteamericana. Su madre confirm¨® ayer desde el pueblo de Moncalvillo (Burgos) que su hijo estaba siendo atendido en un centro hospitalario de la ciudad. Abad, de 55 a?os, dej¨® Espa?a con 6, y trabajaba en una de las Torres Gemelas. Sus padres viven con ¨¦l en Nueva York, pero ahora estaban de veraneo en Espa?a.
Los consulados de la Uni¨®n Europea decidieron ayer coordinar la recolecci¨®n de datos sobre posibles desaparecidos. Los familiares que ahora llamen a estas oficinas deber¨¢n dar la mayor cantidad posible de detalles (peso, altura, incluso fotos) en un formulario tipo para facilitar las labores de rastreo. Estos datos ser¨¢n luego comunicados por Internet al centro de emergencia que ha montado la alcald¨ªa de Nueva York.
Se van conociendo m¨¢s testimonios de espa?oles que escaparon por los pelos de la tragedia. Mar¨ªa Gonz¨¢lez, que trabajaba en el piso 83? de una de las torres, se salv¨® porque aquel d¨ªa decidi¨® viajar a Washington por negocios. Juanjo Fern¨¢ndez, un empleado de Merrill Lynch, cont¨® c¨®mo ¨¦l y su esposa, embarazada de ocho meses, lograron escapar de sus oficinas, adyacentes a las torres, cuando oy¨® el estruendo del primer avi¨®n. Se trata de uno de los edificios que ahora amenazan con derrumbarse y que sigue estando vac¨ªo.
El consulado tambi¨¦n ha desplegado todos los esfuerzos para ayudar a los espa?oles que se han quedado atrapados en Manhattan. 'No hemos cerrado ni una sola hora desde la tragedia', dijo ayer Cassinello. En los tres ¨²ltimos d¨ªas, unas doscientas personas se han acercado para pedir ayuda con problemas de alojamiento (los hoteles est¨¢n abarrotados), dinero o papeles (algunos tuvieron que ser evacuados de urgencia y no tuvieron tiempo de llevarse el pasaporte). 'Hemos dado unos 4.000 d¨®lares -unas 740.000 pesetas- a la gente que se hab¨ªa quedado sin fondos. Algunas personas han sido muy generosas e incluso han ofrecido sus propios apartamentos para ayudar a los que se han quedado en la calle'.
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