'Vidas privadas', una historia sobre la represi¨®n
Era una de las pel¨ªculas m¨¢s esperadas de la selecci¨®n de Zabaltegi, y no por casualidad: Vidas privadas, coproducci¨®n hispano-argentina, es la opera prima de Fito P¨¢ez; su m¨¢xima estrella es su mujer, Cecilia Roth, y el resto del elenco incluye nombres como el del emergente actor mexicano Gael Garc¨ªa Bernal o del veterano H¨¦ctor Alterio. Y por si fuera poco, la pel¨ªcula ven¨ªa aureolada de un cierto morbo, el que, se dec¨ªa, planteaba su fuerte contenido er¨®tico, y por su contenido pol¨ªtico, porque de eso se trata en el fondo: de una pel¨ªcula sobre el pasado, la memoria reprimida, los traumas que dej¨® el periodo m¨¢s negro de la historia argentina del siglo XX.
Pero todas las expectativas naufragaron a poco de comenzar la proyecci¨®n. Porque la historia que se muestra, hecha con los magnos fustes de la tragedia cl¨¢sica griega, cargada de sugerencias que se aguantan s¨®lo en el primer tercio del metraje -una hermosa mujer, Roth, que paga por o¨ªr a parejas hacer el amor para ella, pero sin verlas jam¨¢s: un extra?o caso de fonofilia; los secretos que encierra su actitud; el previsible ajuste de cuentas que se montar¨¢ con su regreso a Buenos Aires, tras m¨¢s de 20 a?os de vida en Madrid- comienzan pronto a diluirse.
Gui¨®n torpe
?Por qu¨¦? Sencillo: por un gui¨®n torpe, a pesar de estar firmado por uno de los m¨¢s originales novelistas argentinos, Alan Pauls; un libreto que acumula situaciones de tensi¨®n insoportable cuya falta de gradaci¨®n las va anulando sistem¨¢ticamente una tras otra. Porque P¨¢ez parece dispuesto a mantener a cualquier coste un encuadre bonito sin preocuparse porque ¨¦ste atente contra el contenido de lo narrado.
Porque la historia de amor que la ficci¨®n plantea es mostrada de una forma tan abrupta como incre¨ªble; porque, en suma, fallan los mecanismos, los patrones de relleno del sentido que el espectador debe actuar cuando, ante una tragedia como ¨¦sta, s¨®lo tiene a mano su parca experiencia para hallar el camino de las explicaciones: demasiados peros que hunden la credibilidad de una pel¨ªcula cuya honestidad pol¨ªtica parece a salvo, pero cuya torpeza narrativa corre pareja con sus ambiciones de discurso personal.
En un d¨ªa tan marcado por el filme de P¨¢ez destacaron, no obstante, dos pel¨ªculas de g¨¦nero, ampliamente ovacionadas por un p¨²blico entregado y, a estas alturas, necesitado de distensi¨®n, amabilidad y sonrisas: la australiana The bank de Robert Connelly, un thriller tan acad¨¦micamente construido y solventemente llevado a im¨¢genes como previsible; y una comedia, la noruega Elling, de Petter Naess.
Babelia
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