Pel¨ªcanos

Una emisora de radio aport¨® la noticia de que nos hab¨ªan vuelto a dar pel¨ªcanos de Alaska por pel¨ªcanos del golfo P¨¦rsico. Despu¨¦s de los criminales actos terroristas de Nueva York y Washington, aparecieron im¨¢genes de las reacciones habidas y destac¨® la que reproduc¨ªa el gozoso jolgorio de un grupo de palestinos entusiasmado por la punter¨ªa de los kamikazes por Al¨¢. Imagen cre¨ªble, porque los palestinos est¨¢n acostumbrados a que los israel¨ªes les bombardeen con misiles norteamericanos y les destruyan barrios enteros como actos de represalia.

Cabe la posibilidad de que esas im¨¢genes fueran tan falsas como los pel¨ªcanos agonizantes en el golfo P¨¦rsico por la maldad contaminadora de los iraqu¨ªes y que resultaron ser aves de Alaska en plena agon¨ªa a causa de la contaminaci¨®n captada por un petrolero averiado. La muerte de los animales se convirti¨® en un argumento m¨¢s justificativo de la guerra del Golfo y de un bloqueo de Irak que est¨¢ causando, hoy, miles de muertos por desnutrici¨®n o falta de productos farmac¨¦uticos. Pudiera manipularse ahora la imagen de palestinos, gozosos, pero no por estos atentados, sino por la invasi¨®n iraqu¨ª de Kwait.

Supongo que no vivimos d¨ªas como para comprobar con precisi¨®n la veracidad de los mensajes recibidos, pero alertados por la confusi¨®n de los pel¨ªcanos que nos cuelan en estos tiempos de supuesta opulencia comunicativa, habr¨ªa que recuperar el discurso de la raz¨®n receptora por encima del de la emoci¨®n y del de una interesada ceremonia de la confusi¨®n. Irrita o entristece, seg¨²n los barrios temperamentales, comprobar c¨®mo en la era de la supercomunicaci¨®n es posible retransmitir la nada por televisi¨®n y tambi¨¦n el nadie, porque resulta que lo pol¨ªticamente correcto es proporcionar la nada disfrazada de todo y el nadie tambi¨¦n bajo el ropaje simb¨®lico de la humanidad.

Frecuentemente he o¨ªdo o le¨ªdo justificaciones de la manipulaci¨®n televisiva as¨¦ptica sobre lo ocurrido en Nueva York, a partir del dato de que la crudeza con la que se vivi¨® la retransmisi¨®n de la guerra del Vietnam desmoraliz¨® a la poblaci¨®n. No. Lo que hizo fue movilizar la conciencia antibelicista y por eso no volveremos a ver cad¨¢veres en las guerras, ni pel¨ªcanos o palestinos en su sitio y a su tiempo.