Trimble logra su reelecci¨®n al frente del Gobierno del Ulster
Diputados unionistas y nacionalistas se enfrentan en la Asamblea
Irlanda del Norte fue fiel a s¨ª misma. Un barullo entre diputados favorables y contrarios al proceso de paz hizo casi inaudibles las palabras que estaban pronunciando David Trimble y Mark Durkan para agradecer su elecci¨®n como ministro principal y adjunto al frente del Gobierno de Irlanda del Norte. Empujones e insultos entre los electos coronaron cinco d¨ªas de incertidumbre que acabaron de manera feliz para los partidarios del Acuerdo de Viernes Santo. Despu¨¦s de algo m¨¢s de dos meses de crisis, Irlanda del Norte vuelve a la normalidad institucional.
La reelecci¨®n de Trimble, que dimiti¨® como ministro principal el pasado 1 de julio, ha necesitado dos votaciones y cinco d¨ªas de maquiavelismo jur¨ªdico-institucional bajo la batuta del ministro brit¨¢nico para Irlanda del Norte, John Reid. Al final triunf¨® la f¨®rmula de adscribir como unionistas a tres diputados de Alianza, un partido normalmente inscrito como no sectario: ni cat¨®lico ni protestante, ni nacionalista ni unionista.
El ama?o jur¨ªdico tuvo ayer un amplio respaldo pol¨ªtico en el conjunto de la C¨¢mara. El cambio de adscripci¨®n de esos diputados fue apoyado por 70 de los 99 miembros de la Asamblea que ejercieron el voto. Pero del conjunto de unionistas, 29 votaron en contra y 28 a favor. Estos resultados se repitieron luego, cuando la Asamblea vot¨® la elecci¨®n del unionista moderado Trimble y del nacionalista moderado Durkan al frente del Ejecutivo.
Los unionistas radicales del pastor Ian Paisley, que el viernes impidieron la elecci¨®n del ministro principal al captar a favor del no a dos diputados del partido de Trimble, presentaron el lunes un recurso contra el truco legal puesto en marcha por los partidarios del Acuerdo de Viernes Santo. Eso les permiti¨® retrasar la votaci¨®n hasta ayer, pero fracasaron en su intento de volver a retrasarla 24 horas.
La victoria de Trimble ha quedado empa?ada no s¨®lo por la necesidad de dos votaciones y un ama?o, sino por la ausencia de la diputada rebelde Pauline Armitage, cuyo voto el viernes fue decisivo pero ayer no pudo acudir porque por la noche hab¨ªan asaltado su casa, seg¨²n denunci¨®.
Fue el primer incidente del d¨ªa, pero no el ¨²ltimo. En los salones de la Asamblea, diputados nacionalistas y unionistas favorables y contrarios al acuerdo se enzarzaron a gritos y empellones mientras Trimble intentaba pronunciar sus palabras de aceptaci¨®n como ministro principal.
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